¿Crees que lo sabes todo sobre los mayores villanos que han marcado la historia a lo largo de los años? ¿Sabes de dónde provienen los grandes mitos de la maldad humana? ¿Crees que la corrupción es solo cosa del presente? Nunca te han contado la historia de esta forma. Este libro te desvela, te descubre y te destripa el origen de las personas más desleales, infames, indignas y fascinantes de nuestra historia. ¡Con todo el humor y las ilustraciones desternillantes de las famosas canciones de DESTRIPANDO LA HISTORIA!
En Destripando la historia nos encontramos un libro lleno de curiosidades acerca de un conjunto de personajes de lo más variopinto pero con un nexo en común: todos ellos se han ganado a pulso su condición de villanos.
A través de textos llenos de humor y de unas tronchantes ilustraciones en blanco y negro, Pascu y Rodri nos desgranan las atrocidades cometidas por Hitler, nos desvelan quién fue la mayor asesina de la Inglaterra victoriana o por qué la mala fama del lunes está totalmente justificada. Y es que los protagonistas provienen de distintas épocas y culturas, desde Drácula hasta Donald Trump, pasando por el brócoli y El Coco.
Como siempre sucede de manera irremediable en este tipo de libros, no todos los capítulos tienen la misma fuerza, porque es imposible. Pero, en cualquier caso, todos han conseguido sacarme, al menos, una sonrisilla maligna. Destripando la historia ha sido un libro muy diferente a lo que suelo leer. Es una apuesta original, muy entretenida y divertida. He disfrutado mucho la lectura, he aprendido algunas cosillas que no sabía e incluso he conocido algún personaje del que nunca había oído hablar. Aunque es un libro muy ligero, ha resultado ser muy divertido y enriquecedor. Muy recomendable para los amantes del humor, las curiosidades y la historia. Si no conocéis el canal de YouTube de Rodrigo Septién, os lo recomiendo. Allí, en la sección de DLH, podréis encontrar otras historias destripadas, como algunos cuentos clásicos en los que se basan películas de Disney, festividades tradicionales e incluso Harry Potter.
—Opinión de Inés Díaz Arriero—