El curioso encuentro entre un gato muy especial y un niño se produce en el jardín de la casa de Velintonia. Esta famosa casa, sita en Madrid, nos descubrirá las fascinantes experiencias y reuniones literarias que se vivieron allí, en el que fue hogar del poeta y premio Nobel de literatura Vicente Aleixandre.
Con ilustraciones de Carmen García Iglesias
El poeta de Velintonia es un libro mágico, inspirador y con una historia única entre sus páginas. Desde la primera página se nota el cariño que Emilio Calderón y Carmen García Iglesias tienen por Vicente Alexaindre, porque está plagado de bonitos detalles.
Velintonia vista por los ojos de un gato, por los ojos de Vicente Alexaindre y también por los ojos del lector, porque nosotros los lectores a través de esa verja que separa a la casa de la calle, seremos testigos de esos días de luz, de amigos, de composiciones, de canciones tocadas al piano...
Creo que Vicente Alexaindre tenía verdadera pasión por los pequeños detalles, por las pequeñas cosas de la vida y lo plasmó no sólo en su obra, también a la hora de tener su casa.
Sus amigos eran personas importantes por lo que me gusta como el libro plasma las visitas de Federico García Lorca o de Miguel Hernández , entre otros.
Su casa era un verdadero huerto de poesía, de ideas, de risas, pero también de tristezas al regresar a ella tras la guerra, pero Velintonia esta llena de la magia de la literatura.
El poeta de Velintonia es un canto a no olvidar a esta figura tan importante de nuestra literatura, pero como os decía antes bajo la atenta mirada de un gato callejero que formo parte de este lugar.
Las ilustraciones de este libro hacen que el lector que no ha visitado la casa de Vicente Alexaindre se forme una idea en su cabeza.
El lenguaje utilizado para dar vida a esta narración es un lenguaje sencillo, pero lleno de bonitos detalles que harán que el lector se enamore del poeta, de su vida y de esta casa.
Un libro recomendado para todas las edades, además que también encontraremos algunos trozos de poemas importantes para esta casa, ya que tomaron forma en Velintonia.
Cuando cerré el libro tuve que ir a ver con mis propios ojos esta casa.
Había pasado muchas veces frente a ella, pero no sabía que esta era la casa de este gran poeta y gran persona.
Al llegar y ver cubierto todo de maleza y con la palabra "se vende" me ha invadido una gran tristeza, como cuando Vicente Alexaindre, se tuvo que trasladar durante la guerra civil española a otra casa, creo que ese mismo sentimiento lo he tenido yo.
Es un libro entrañable, enriquecedor y lleno de ternura, seguro que el poeta estará feliz de que todavía se le recuerda.
Se lee en un suspiro, pero la curiosidad por la vida de Vicente Alexaindre, os mantendrá en vilo durante varios días, por lo que iréis leyendo aquí y allí, sus poemas, su discurso del Premio Nobel de la Literatura, algunos vídeos sobre su figura.
Creo que es un Nobel olvidado por muchos, pero este libro está para que no caiga en el olvido
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