Serie mítica de los 90 que mantuvo en vilo a más de uno y de una, en la cual me incluyo, pero que tras un final algo abrupto y películas, dejo un sabor agridulce a los seguidores de Mulder y Scully. Os confieso que cuando me enteré que se habían vuelto a reunir David Duchovny e Gillian Anderson, pensé que era mentira o era una broma que querían hacer para sus seguidores, pero en cuanto empezaron a salir fotografías y todo se confirmo, no cabía en mi misma de la alegría.
Expediente X marcó a toda una generación como Perdidos, hizo con otra generación posterior, pero ambas comparten algo especial, unos personajes que anhelan descubrir cosas, unos más escépticos que otros pero con muchos misterios en sus vidas. Empecemos ¿Qué me pareció esta primera toma de contacto? Pienso que la esencia de los 90 sigue intacta, que han apostado fuerte con este episodio recuperando a un personaje que podría dar mucho de si y creando nuevos frentes de la mano de nuevos personajes.
Es un punto y seguido, como si la última película no existiese y como si algunas temporadas que fueron nefastas fuesen borradas, por eso digo que ha regresado y lo ha hecho por la puerta más grande que hay. Creo que los fans más acérrimos de esta serie, le van a dar su beneplácito, y que la gente que por primera vez se vea este capítulo, va a querer ver la serie completa de los 90, porque de verdad, creo que atrapará a nuevos fans.
Volver a ver a Mulder y Scully, ha sido un viaje al pasado dulce, en donde empieza una nueva etapa para estos Expediente X en donde los nuevos guionistas y el director, quieren que borremos todo lo malo del pasado y creemos nuevos recuerdos y lo hacen poniendo patas arriba todo lo que sabíamos y todo lo que habíamos creído con anterioridad.