[Opinión] El extraño rumbo de Homeland
Amaia Ceinos 27 octubre, 2013 0
Cuatro episodios llevamos de Homeland, el quinto se emite esta misma noche en Showtime en Estados Unidos, y no sé muy bien qué pensar de la dirección que la trama está tomando. Me quedo con que su rumbo es extraño porque hemos pasado de un psiquiátrico a otro y de ahí a un edificio de okupas de Venezuela.
Sí, si aún no has llegado al cuarto episodio de la temporada mejor que no sigas leyendo a no ser que quieras una ración de spoilers.
Al final del cuarto episodio hay una revelación más o menos importante, digo más o menos porque a mí particularmente no me hizo quedarme ojiplática ni soltar un “WTF” o abrir la boca de sorpresa. No se me había pasado por la cabeza que Carrie (Claire Danes) estuviese, entre comillas, fingiendo y dentro de una operación orquestada por su jefe y amigo Saul Berenson (Mandy Patinkin), pero vaya que creo que como giro fue algo inverosímil más que nada porque si todo era mentira ¿por qué esa indignación por parte de Carrie cuando estaba sola en su casa viendo la televisión siendo testigo de cómo la vendían?
¿En qué punto estamos? Hay una investigación de la que poco se nos ha mostrado para coger al máximo responsable del atentado contra la CIA, un iraní que parece estar interesado en que Carrie le cuente qué métodos sigue la agencia para localizar objetivos. Poco movimiento hemos tenido en lo que a dicha investigación se refiere porque Homeland se ha centrado más en mostrarnos a una Carrie al límite y “repudiada” y las consecuencias de la revelación de Nick (Damian Lewis) como terrorista en los Brody. Ojo, es de lo que más me ha gustado de lo visto hasta ahora porque eso de que te muestren lo que pasa después está bien pero por otra parte se están llenando valiosos minutos para que la historia avance.
Brody ha tardado tres episodios en aparecer y nos lo encontramos como al principio, herido y atrapado en Venezuela en un edificio de okupas armados hasta los dientes que no le dejan marcharse y cuyo jefe conoce a Carrie y parece deberle un favor.
El giro argumental supongo que hará que la investigación se mueva y que la CIA, al menos Saul y Carrie, ponga la carne en el asador para atrapar al terrorista pero ¿dónde deja eso a Nick? ¿Y a su familia? Los dos primeros me demostraron que, por mucho que me guste, Nicholas Brody es prescindible y además ahora creo que su familia poco pinta ya.
No me tragaría que al final hubiese sido Brody, engañando completamente a Carrie, quien echara una mano en el atentado y aunque creyera que Saul iba a ser el malo, he cambiado de idea porque él no se fía de quien en la agencia parece ser su mano derecha, Dar Adal (F. Murray Abraham) y es el candidato perfecto para resultar ser un villano por su odio a lo que sea.
Seguiré viéndola, claro, para ver qué rumbo toma la historia y si pasa algo sorprendente pero de momento Homeland no me engancha como antes porque falla en haber abierto muchas tramas sin centrarse. Tal vez lo haga a partir de ahora, y si así es me alegraré por ello.
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