Oposición demencial

>Asalia Venegas

El análisis del discurso nos permite estudiar los tiempos históricos por medio de las proyecciones que se hacen a través de la palabra, de los textos o de las imágenes. Vemos tendencias y se ubican personajes y distintas acciones de diferentes grupos sociales. Si sumamos a esto una lectura del discurso que se estructura para ser difundido por los MCS, podremos acercarnos a una realidad que en este caso tiene que ser revertida.

La última década ha sido de grandes conmociones. La política se ha develado. Ha perdido su manto mítico y ha sido tocada directamente por el pueblo. Cada día, la cotidianidad se trastoca y los acontecimientos discurren aceleradamente. Las visiones que transmiten los MCS deben asumirse con precaución. Los contenidos de estos llevan a análisis donde el perfil de esos MCS queda en cuestionamiento.

A futuro, en el mediano y largo plazo, los contenidos difundidos por esos medios serán analizados desde diferentes prismas y se constatará cómo se confunde la realidad. En el último mes, a raíz del viaje del Presidente y su posterior hospitalización en La Habana, hemos visto un estado demencial en los voceros de la oposición reclamando su presencia. Presionaron duramente a la Asamblea para que definiera su falta como absoluta y para que el Vicepresidente fuera juramentado.

Los 26 días de ausencia del Presidente fueron pesadillosos para los opositores. Varios aspiran con fuerza a ser candidatos en 2012. Exigían la instauración de un gobierno de transición o las elecciones anticipadas; ya que, según ellos, el Gobierno tenía su sede en La Habana y eso contravenía lo estipulado por la Constitución. El país se paralizó para los opositores, los problemas desaparecieron. El nudo estaba en la ausencia, retorno o sustitución del Primer Mandatario.

La MUD y la CEV saltaron al ruedo. Periodistas recalcitrantes drenaron su odio. Las empresas mediáticas, sin máscaras, titularon: “El cáncer paraliza a Venezuela”; “tendrá que luchar por el poder, por la reelección y por la vida, si el cáncer se lo permite”. Otro tituló: “La revolución é finita”; “prevén debilitamiento de influencia regional del mandatario”. Pobres de espíritu. El Presidente retornó al país. Su pueblo lo ama y lo aclama. La lucha continúa.

Periodista/Prof. universitaria

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