El mensaje que nos han dado en la presentación que acabo de citar ha sido que las bolsas están baratas y que se pueden obtener importantísimas ganancias en un período de 2 años. Pero que existe una situación política muy compleja en dos de los tres problemas principales que afronta la economía mundial en estos momentos: las finanzas públicas en la Europa del euro y las finanzas públicas de los EEUU (en especial el primero).
¿Será capaz Alemania de liderar de una vez Europa, y conseguir un equilibrio entre la ortodoxia y el apoyo entre socios? ¿Serán capaces los líderes europeos de los países con mayores déficit de afrontar los recortes presupuestarios que exigen los nuevos tiempos de crecimiento moderado? Esas son las grandes preguntas, por ahora no contestadas, que tienen a los mercados de algún modo “secuestrados”.
El mensaje es muy claro: Si se resuelven esas incógnitas, las bolsas subirán como la espuma.
Y en cuanto a España, un gran problema: clarificar la situación de la banca. Es algo que ya se sabe, pero en lo que se avanza lento y sin la suficiente transparencia. Si se hace será porque quienes mandan piensan que es mejor no enseñar los trapos sucios aunque se especule con ellos, porque enseñarlos sería peor que no hacerlo. Si no es así no se entiende.