Necesitamos de las arterias para llevar sangre oxigenada desde el corazón hacia todo el cuerpo, esas paredes resistentes y elásticas que son esenciales para mantener la vida y las ilusiones despiertas. Y una vena sencilla con sangre desoxigenada viaja sin boleto por todo el cuerpo, transportando grietas procedentes de los tejidos; y que un impulso lleve a otro, no es causa disipada.
De optimismo compulsivo y otros miocardios por los cuales morir, de otras ganas mentales de quererte o pensar una vez más. De brindar alivio con un abrazo, y ojalá el diagnóstico sea por tanto insomnio y recuerdos por olvidar. Me tomaré la dicha con dos de azúcar, y en la sala de no esperar.
Sonríes, y es un comportamiento repetitivo, tal vez sea en respuesta a tus emociones que nunca te causo, o tal vez miedo. Pero no lo dejes de hacer, inventas vida y no lo sabes, con esa pequeña comisura en tus labios.
Ya no me alcanzó la vida, tampoco las píldoras.
Déjame así, ya me encontraré solución.
Y tampoco soy tarde.
Creo.
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