Ahí van algunos ejemplos, a vuelapluma: la relación entre la existencia en inglés de las hard words, palabras que vienen del latín pero que casi nadie usa, y la fascinación de los ingleses por la lexicografía. La problemática de las palabras-fantasma, que se van heredando de generación en generación. Los conceptos:
el alemán y las lenguas del norte,excepto el inglés, denominan al diccionario "libro de palabras" woordenboek, mientras que en las lenguas eslavas es un derivado de slovo, el término usado para la palabra...Facal cita con regularidad al legendario Samuel Johnson. Una reflexión oportuna: "Tongues, like governments, have a natural tendency to degeneration; we have long preserved our constitution, let us make some struggles for our language"