Oración sangrienta en Vallekas. Alejandro M. Gallo

El crimen del sacerdote será cerrado en falso. Turno de Ramalho da Costa y el Coronel

Un homenaje encendido al barrio

Muchos pensamos que novela negra y boxeo son una misma cosa, que el escritor y el púgil deben ser muy tercos y perseverantes para llegar al objetivo. Por eso consideramos a Alejandro M. Gallo un rudo fajador: con Oración sangrienta en Vallekas vuelve a demostrar que tiene las ideas claras. Las estrategias o los ejercicios de estilo son lo de menos cuando lo que cuenta es seguir golpeando.El propio título nos avisa de que la novela es un homenaje encendido al barrio: obrero, encallecido, en cuyos edificios, en cuyas escaleras, se siguen encontrando vecinos de todo pelaje: un cantautor que se sienta a la puerta del metro, un boxeador que colgó los guantes, un poeta con los bolsillos rotos...También hay espacio para el crimen en este fresco del barrio: un francotirador apodado Cero está asesinando a los imputados por corrupción y un cura obrero del barrio que responde al sobrenombre de "Padre Brown" es asesinado en su propia casa. Como el asunto del sacerdote será cerrado en falso por las autoridades, el viejo conocido Ramalho da Costa y su colega el Coronel empezarán a pelar capas de la cebolla...curia vaticana y relaciones de poderCon fluidez y agilidad, Alejandro M. Gallo escancia la investigación planteando una cuestión que, aunque actualmente está bastante olvidada, sigue siendo importante: cómo la curia vaticana impone una forma muy concreta de entender el cristianismo y las relaciones de poder, reprimiendo con fuerza otras maneras más cercanas a la solidaridad y la integración. Tras la lectura de Oración sangrienta en Vallekas, más de uno sentirá curiosidad por la Teología de la Liberación, las comunidades de base, el fenómeno de los curas obreros...Con esta nueva entrega de las aventuras de Ramalho da Costa, Gallo demuestra que sabe qué lado del ring le corresponde, y sigue golpeando sin dar un paso atrás. Cada vez con más oficio, de forma más certera, sin desperdiciar el empuje, y a la vez completando una obra narrativa coherente que desde hace años tiene su grupo de seguidores, y, lo que es más importante, que puede —debe y seguramente lo hace— ofender en otros sectores.Reino de Cordelia, 2014Compra en Casa del LibroDavid G. Panadero