Orgullo, e-books y prejuicio

He estrenado el e-reader que me han traído los reyes magos, leyendo Orgullo y Prejuicio por segunda vez. Jane Austen y su "es una verdad mundialmente reconocida que un hombre soltero, poseedor de una gran fortuna necesita una esposa", vuelven a conquistarme página a página. 

Supongo que la relectura de este clásico me ha pillado un poco más mayor que la primera vez, quizá un poco más madura, más enamorada y con muchas más lecturas en mi espalda. Igualmente, Austen sigue haciéndome soñar con su narración tan limpia y ligera, con el carácter irreverente de Elizabeth Bennet y con esos prejuicios que todo el mundo parece tener sobre Darcy. 

Y sí, tengo un aparatito que lee de todo, pero no por eso voy a dejar de comprar libros, no por ello voy a empezar a piratear la literatura, porque no me parece ni ético ni moral hacerlo. Eso sí, reconozco que el pequeño Kindle es cómodo, ligero, fácil de transportar y que tiene mucha capacidad para almacenar lecturas y lecturas, tantas que casi necesitaría tres vidas para leerlo todo. No obstante, estoy contenta, sigo disfrutando con la lectura en este formato, me sigue gustando Jane Austen igual que cuando la leí en papel y Orgullo y Prejuicio me sigue pareciendo una obra maravillosa, aun leyéndola ahora en plástico y tinta electrónica.

Y hablando de prejuicios, sí que es cierto que todos tenemos nuestros reparos ante estos e-readers que nos lo leen todo, pero creo que si todos fomentáramos su uso con respeto y responsabilidad, autores noveles podrían llegar a mucha gente y autores consagrados todavía a más y los lectores estarían encantados y seguirían descubriendo día a día el placer de leer un buen libro.
Siempre y cuando, claro, las cosas se hagan bien.
PD: Queridos todos. Tengan o no tengan un aparatito que lo lee todo, siempre y cuando tengan ordenador, pueden descargar la nueva blognovela que he empezado a subir hoy mismo. CLIC AQUÍ.