Una de las reglas que más quebraderos de cabeza han dado a lo largo de la historia y sin duda el origen de multitud de discusiones y debates, no podría faltar en este blog: el Origen e invención del fuera de juego.
Actualmente y en lo que viene siendo el fútbol moderno, se ha convertido en la gran pesadilla de muchos delanteros, jugadores en general, entrenadores, árbitros, aficionados… y origen así de diferentes tácticas tanto de ataque como de defensa.
Sin embargo, pocos saben que el origen de la regla, tal y como la conocemos en la actualidad, fue para que hubiera más goles en los partidos.
La primera ocasión recogida en la que se empieza a hablar del fuera de juego oficialmente, fue en 1848 con las “Reglas de Cambridge”, normas básicas sobre este “nuevo” deporte que se estaba empezando a extender por los colegios públicos de Inglaterra.
La regla inicial señalaba que un jugador se encontraba en posición antirreglamentaria simplemente si se encontraba delante del balón, tal y como sucede en el rugby. Esto tiene una explicación y no es más que el nacimiento de ambos deportes fue de la mano.
La regla fue adoptada por la Football Association (F.A.), la primera asociación de fútbol del mundo, en el reglamento oficial comunicado en 1863. Este hecho provocó que los primeros sistemas tácticos contasen con hasta ocho delanteros y los equipos atacaran en manada, dado que la única manera de hacer avanzar la pelota hasta la portería era regateando o mediante el ataque en masa.
Sin embargo, a los “jefes” de la F.A. no les acababa de convencer el juego que presenciaban, demasiado monótono y sin tácticas o variaciones, y en 1866 introdujeron un cambio significativo en las normas: un jugador estaría en fuera de juego si entre él y la línea de fondo había, esta vez, tres adversarios, normalmente y por lógica, un portero y dos defensas.
Por este motivo, la táctica más utilizada, cambio y fue el 2-3-5, un sistema que sería impensable en el fútbol actual, pero el más popular por entonces.
Ante este último cambio, empezaron a surgir las primeras tácticas y la guerra delanteros/defensas. El protagonista de estos primeros hechos fue Bill McCracken, un lateral derecho irlandés, jugador del Newcastle al cual se le ocurrió que si él y su acompañante en defensa adelantaban su posición en el campo iba a ser mucho más fácil que los delanteros rivales cayeran en fuera de juego. Táctica más que extendida en el fútbol moderno, el llamado “tirar el fuera de juego”.
McCracken dio con la clave y paso como él había planeado, pues fue hacerlo y los arietes, que no se esperaban que los defensas rivales estuvieran tan adelantados, se veían sorprendidos una y otra vez en posición antirreglamentaria. La situación llegó a ser límite e insostenible, tanto para los goleadores como para los aficionados que veían el partido en la grada, ya que en esencia, los delanteros podían empezar a “jugar” desde donde los defensas “quisiesen o permitiesen”, dominaban el juego a su antojo.
De hecho, hay noticias que relatan que muchos partidos de la época tuvieron que ser suspendidos porque los aficionados invadían el campo repetidamente, cansados de que apenas se produjesen goles y el juego tuviese innumerables parones debido a la gran cantidad de veces que los delanteros estaban en posición ilegal.
Eso si, ante tal evidencia y a pesar del público, las reglas eran esas y la táctica McCracken fue copiada rápidamente por todos los equipos ya que era obvio que estaba siendo muy exitosa para el Newcastle, que logró tres ligas y una Copa en aquellos tiempos.
Por ello y para favorecer un juego más vistoso, en 1925 la F.A. decidió cambiar de nuevo el reglamento a favor del espectador y cambió la norma del fuera de juego. Éste sólo sería indicado si entre el jugador y la línea de fondo había, esta vez, dos adversarios, normalmente un portero y un defensor.
La decisión fue acogida con ánimos por los aficionados del deporte rey que verían como el espectáculo iba aumentando. De hecho, el propósito de la F.A con este cambio se cumplió, ya que en la temporada de 1925-1926 hubo un incremento de goles de un 36% respecto a la temporada anterior. Tanto es así que por ejemplo Dixie Dean logró marcar un récord, la friolera de 60 goles en la 1927-1928, marca que ha durado años y años.
Según la regla actual, un jugador se encuentra en posición de fuera de juego si se encuentra más cerca de la línea opuesta que el balón y el penúltimo adversario, lo que quiere decir que el jugador se encuentra más adelantado que todos los jugadores oponentes menos uno (que suele ser el portero oponente).