Orígenes del Peronismo. Parte 4

Orígenes del Peronismo. Parte 4:
El ascenso de Perón, Braden o Perón.

Perón al poder:
El 7 de julio de 1944 Perón accedió al cargo de vicepresidente de Edelmiro Farrel, pero decidió conservar sus cargos tanto en el Ministerio de Guerra y en la Secretaría de Trabajo y Previsión.

En el país había comenzado una fuerte campaña en contra de Perón, que reunía sectores políticos conservadores, el aparato mediático de la época, la Bolsa de Comercio, la oligarquía terrateniente, y al igual que en la batalla de caseros y en la batalla de Pavón, y en el golpe de 1930, se sumaban también los imperialismos extranjeros. En 1930 había sido el Imperio Británico, en 1945 el gobierno estadounidense arremetería con brutalidad frente al avance peronista.
En mayo de 1945,el gobierno estadounidense decidió nombrar a Spruille «El bulldog» Braden como embajador en la Argentina. Los servicios de inteligencia estadounidenses en mancomunión con  su embajada en el país aumentaron vertiginosamente su hostilidad hacia la nueva tendencia que emergía en la Argentina.

«Braden o Perón»

El 5 de julio de 1945 se reunieron finalmente luego de algunas conversaciones anteriores el embajador estadounidense Braden y Perón como vicepresidente de la Argentina. En esa reunión Braden intentó extorsionar a Perón.
Infirió que si la Argentina transfería a firmas de Estados Unidos algunas empresas de origen alemán y japonés expropiadas recientemente por el desenlace en la posición Argentina frente a la guerra, y si permitía el acceso a los cielos argentinos a las compañías estadounidenses, el mismo se comprometía a intervenir en la casa blanca para revertir la política de Estados Unidos para con la Argentina y convertir a Perón en alguien muy popular en el exterior y con imagen positiva.
Perón le daría su famosa contestación:
» a ese precio prefiero ser el más oscuro y desconocido de los argentinos, porque no quiero llegar a ser popular en ninguna parte por haber sido un hijo de puta en mi país».

El «búfalo» Braden trabajó arduamente desde su llegada a la Argentina para aislarla internacionalmente y busco ser un factor de cohesión e impulso para todo la desorientada oposición. Entre sus prácticas de cooptación política la ética brillaba por su ausencia.
Busco desde el inicio confeccionar un amplio frente opositor y fervientemente antiperonista.
Ese frente unido por el espanto fue confeccionado por sectores tan disímiles como los partidos Comunista, Socialista, Unión Cívica Radical, demócrata Progresista y Conservador, la Federación Universitaria Argentina, la Sociedad Rural, la Unión Industrial, la Bolsa de Comercio y los sindicatos Opositores. La unión entre la socialdemocracia y la oligarquía nacional, y dirigida por un representante nada menos que de Estados Unidos, representaba muy bien la estirpe Antiperonista, que sería una nueva y prolongada alianza en la historia Argentina.
Braden se erigió rápidamente como representante y líder de ese movimiento opositor y antiperonista que se organizó en lo que luego se llamaría » Unión Democrática», que de democrática tendría poco y nada.

Pero el frente norteamericano no sería el único inconveniente que tendría que afrontar el incipiente Peronismo de aquellos años, ya que por el año 1945 la URSS Y USA aún se veían como aliados en contra del » nazifascismo».
Y ambos visualizaban al Coronel representante de los intereses obreros como posible Nasifascista.
Así, que los dos imperios más poderosos que haya conocido la historia de la humanidad se aliaron en su efervescencia antiperonista, de forma que hubiese sido imposible un año después de finalizada la guerra.
En ese rechazo al peronismo, ignoraban todos los logros populares que había ejercido Perón desde la Secretaría de Trabajo.
Yanquis y marxistas, Sociedad Rural y Partido Comunista aglomerados frente al peronismo.
La desorientación profunda que arropaba a la oposición era tan marcada, que fue la única vez en la historia en la que un líder fue acusado al mismo tiempo de «nazifascista» y «marxista».

El 16 de julio de 1945, se publicó en todos los diarios un » manifiesto del comercio y la industria» perteneciente a la patronal que reunia 300 firmas de distintas entidades donde afirmaban la dificultad en cumplir con las disposiciones en favor de.los obreros impulsadas por la secretaría del trabajo.
La Sociedad Rural el 19 de julio se sumaba con un comunicado similar en el que defendía la «libertad económica».

Esa maniobra posibilitó a Perón una jugada maestra, que muy rápido de reflejos contesto arguyendo que esas fuerzas firmantes de los documentos representaban la oligarquía quw habia gobernado fraudulentamente durante la década infame.
La jugada había dado redito, a los pocos días los diarios eran inundados con solicitadas firmadas por sindicatos y trabajadores.

Perón pronunciaba el 7 de agosto de 1945 un discurso en el Colegio Militar en el que precisaba su concepción política:
» la revolución Rusa es un hecho consumado en el mundo. Hay que aceptar esa evolución. Si la revolución Francesa terminó con el gobierno de la Aristocracia, la Revolución rusa termina con el gobierno de las Burguesías. Empieza el gobierno de las masas populares.
(…) si nosotros no hacemos la revolución pacífica, el pueblo hará la revolución violenta.
(…)
Si yo entregara el país, me dijo un señor( se refiere a Braden), en una semana sería el hombre más popular en ciertos países extranjeros.(…)
Esta es la cruda realidad que se nos presenta. Podemos solucionar todos los problemas, no tendriamos ningun problema mas, pero tendríamos que entregar el país. (…) Por eso luchamos y seguiremos luchando contra el diablo si fuera necesario.(…) están algunos señores detrás de ciertos embajadores haciendo causa común con ellos para combatirnos a nosotros que somos los que estamos defendiendo al país; están los diarios pagados, en los que aparecen artículos de fondo, con las mismas palabras enviadas desde una embajada extranjera y frente a una página pagada por la misma embajada.»
No dejó lugar a dudas, quedaron escindidos los bandos para siempre, la disputa de poder era manifiesta, se diluía cualquier posibilidad de actores neutrales. La Argentina quedaba claramente dividida en la antinomia Peronista y Antiperonista que se perpetuaría hasta el presente.

Próximamente la Parte 5 de esta apasionante historia:
El 17 de octubre, la captura de Perón, intentos de asesinarlo, el pueblo se hace escuchar.

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Laura Garcia