Navego de blog en blog, leyendo lo que me interesa, asombrándome con textos escogidos específicamente por mi criterio, ése que aparentemente nunca me falla. Hasta ahora. No sé si sorprenderme o aceptar que hasta en el mundo de los bloggers existen plagios, copias unos de otros y falta de originalidad. Porque no la hay. No la tenéis. Buscar la aceptación fácil no es escribir, ni mucho menos ser un artista de la palabra. El oportunismo debería estar prohibido en ciertos aspectos de la vida, sobre todo si acarrea injusticias sobre aquellos que realmente tienen talento.
Muchos de los blogs “estrella” solo se limitan a escribir lo que los demás quieren leer. Pero qué sabréis vosotros de lo que queremos leer. Qué sabréis vosotros de la vida, presumiendo de experiencia y escribiendo como si fuérais una deidad superior y nosotros tan solo formemos parte de un rebaño desorientado buscando el camino correcto. Desconozco la edad media de vuestros lectores asiduos, pero por lo pronto sé que carecen de criterio; se nutren de vuestra ausencia de originalidad cuyo origen es la búsqueda del aplauso fácil en palabras vacías. Y os llamáis escritores, para colmar vuestro vaso de copias. Es curioso que entre vosotros habléis sobre los mismos temas, abarquéis las mismas inquietudes. Todo en un espacio temporal de dos o tres días. De verdad os pregunto, ¿dónde os habéis dejado la originalidad y las ganas de escribir tan solo lo que pensáis? ¿Cuándo fue la última vez que recibisteis una crítica?
Y no generalizo, porque es de idiotas. Aplaudo a aquellos blogs que conservan su personalidad creativa, porque los hay, solo que apenas se conocen porque no hacen ruido.
Originalidad, por favor. Solo pido leer algo diferente. Algo que realmente haya salido de vuestras entrañas, cicatrices o sonrisas. Algo que merezca mi tiempo. El mundo del blogger se está convirtiendo en una comercialización de talentos que se quedan en nada, por querer ser todo, para todos.