Con cambio de sede y horario debido al mal clima, el sábado 29 de septiembre la Orquesta Sinfónica de San Luis Potosí ofreció el concierto “Por amor a La Tierra” a partir de las siete y media de la noche en el Exconvento de San Agustín, foro que resultó insuficiente para dar cabida al público que fue testigo de este homenaje a la Naturaleza con buena música presentado por la Secretaría de Cultura con el apoyo y coordinación de la Secretaría de Turismo y el municipio de Xilitla.
Bajo la dirección de su titular, Mtro. José Miramontes Zapata, la OSSLP introdujo a los asistentes en una profunda experiencia emotiva iniciando con parte de una de las obras en las que L.v. Beethoven volcó su aprecio a la naturaleza: el Allegro ma non troppo, primer movimiento de su Sexta Sinfonía, “Pastoral”; titulada como “Apacibles sentimientos que despierta la contemplación de los campos” y en la que Beethoven utiliza el sonido como instrumento para evocar no solo el paisaje rústico al que acudía para relajarse, sino demostrar su maestría al compartirnos los sentimientos que en él inspiraban.
Para continuar, la OSSLP interpretó una danza tradicional muy popular en la música de Escocia, Inglaterra e Irlanda que data del siglo XVI: el Hornipipe, esta versión es parte de una compilación de obras escritas por Georg Friedrich Händel con el título genérico de “Música Acuática”, y que se incluye en la primera de las tres suites. Luego siguió la interpretación del segundo y más conocido de los seis poemas sinfónicos de “Mi Patria”, de Bed?ich Smetana; es decir, “El Moldava”, obra que fue el aporte nacionalista del autor a la actual República Checa.
En este concierto realizado con acceso sin costo no podía faltar la música sinfónica mexicana, y en esa única velada se inició dando cabida a nuevos compositores nacionales presentar el arreglo sinfónico que hiciera Jesús Flores de “Xochipitzáhuatl” (flor menudita), una danza ritual que sigue presente en todos los pueblos que hablan náhuatl y que se interpreta en rituales místicos y religiosos en honor a la Madre Tierra. Cabe resaltar que en estos, la concepción de la vida y la muerte se muestran como una unidad inseparable.
La obra cumbre de Silvestre Revueltas: “Sensemayá”, dio un especial énfasis a la importancia de la Naturaleza en los pueblos prehispánicos; pues inspirada en versos del poeta cubano Nicolás Guillén donde se describe el ritual pagano de dar muerte a la serpiente en ese país, Revueltas convirtió a este poema sinfónico en paradigma de la complejidad rítmica, al recrea alegorías y pigmentaciones de un México prehispánico donde la serpiente es parte fundamental de su ideología, pero sin caer en chauvinismos ni empobrecimientos retóricos.
Luego vino la muy festiva “Conga del Fuego Nuevo”. Inspirada en la música folklórica veracruzana, esta obra del músico nacido en Álamos, Sonora, y a quien se le considera el compositor mexicano en activo con más reconocimiento internacional, Arturo Márquez, dio el marco perfecto para cerrar la velada con la cumbre del Nacionalismo Mexicano: el “Huapango”, de Moncayo.
Ante la ovación de los asistentes, la OSSLP regresó al escenario para regalar como encore uno de los trabajos más interpretados como arreglista y orquestador de Mateo Oliva: la “Suite de Lara”, que reúne la riqueza sonora de canciones emblemáticas de el Flaco de Oro.
Tras esta presentación, la OSSLP se prepara para regresar a sus conciertos de gala en el Teatro de La Paz el próximo viernes 5 de octubre a las 9pm y domingo 7, a las 12:30 h., recibiendo a la soprano Zaira Sodia con quien se interpretarán lieders de Richard Strauss y que marca el inicio de Temporada de Conciertos Otoño-Invierno 2018 de la Sinfónica de SLP. Los boletos para estas dos fechas ya están a la venta en la taquilla del Teatro de la Paz y www.ticketmania.mx
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