Otaku in love, de Hidenori Hara

Para empezar la reseña tengo que hacer una confesión: le he dado una relectura a esta serie con la intención de comentarla y ponerla a la venta posteriormente, pues el recuerdo de mi primera y única lectura hasta el momento no era muy positiva. 

Se mantienen algunas cosas que me mosquearon en su momento, pero a pesar de ellas, la sensación ha sido algo mejor, por lo que ya no tengo tan claro que la vaya a vender... aunque aún no lo descarto.

Argumento

El del tren (edad = los mismos que lleva sin novia) es un joven otaku que no liga ni para atrás y que, un buen día, ayuda a unas señoras y a una joven a sacarse de encima a un borracho molesto en el vagón de tren. Por suerte, el revisor no tarda en aparecer para encargarse del asunto, aunque les pide a los involucrados que pasen por comisaría para contar los hechos.

La atracción que ha sentido por la chica es inmediata pero ¿invitarla a salir? ¡¿Cómo?! Al menos, tras el incidente, ella se ha quedado con sus datos y, como agradecimiento por lo que ha hecho, le envía unas tazas de la marca Hermes. Quienes le animarán a ponerse en contacto con ella, en respuesta a las tazas, son los miembros de un foro que le apoyarán y aconsejarán para llegar a un deseable final feliz.
Reseña

Hace unos años, tuvo mucha fama en Japón pues se basa en un relato real que recopiló uno de los miembros de ese foro con el seudónimo de Nakano Hitori (que significa "Uno de ellos") en una exitosa novela que acabó dando un famoso dorama (que no he visto), Densha Otoko, y varias adaptaciones a manga, entre ellas la que trajo Glénat a España.La historia tiene el punto especial que le da basarse en hechos reales. Las dudas, inseguridades, miedos, esperanzas y alegrías del protagonistas nos llegan a emocionar de verdad. Con todo, lo más divertido e interesante son las aportaciones en el foro de personas muy diferentes: otros hombres con poca o ninguna experiencia, una pareja joven (primero ella y luego él también se suma al hilo), una madre, hombres mayores, asalariados... Sus reacciones y palabras a los avances y cambios de estados de ánimo de "Tren" son, para mí, lo mejor de la serie. Entre todos, incluido el protagonista, hay una gran combinación de sentimientos muy humanos con los que es imposible no empatizar y que te pongan una sonrisa tonta en la cara.

Pero aquí llegan los problemas. Una primera pega que hace sangrar los ojos es que en el foro escriben con multitud de faltas de ortografía que se han mantenido en el manga para conservar la fidelidad con la realidad. Ya sabemos que es algo que pasa en las redes y se pueden entender las que se usan por abreviar, pero las de tipo "k" en vez de "c" son un dolor. Puristas de ortografía y gramática: advertencia hecha.Y así llegamos al que es, para mí, el mayor problema con esta historia y es el cambio integral que lleva a cabo el protagonista. Por gustar a la chica se deshace de toda su vida de otaku. Es al principio del tercer y último tomo que hace limpieza en su cuarto para tirarlo prácticamente todo salvo las figuras y tomos más exclusivos que regala a unos amigos (amigos que hasta ese momento ni se sabía de su existencia ¿también les da la patada a ellos?) o una pequeña caja que acaba guardando como "recuerdos de juventud". Por no hablar de un cambio de estilo completo. Me parece horrible la idea de dejar toda tu vida por una persona que ni siquiera llega a decirle en ningún momento que le moleste nada de ésta.

En contraposición a "Tren", "Hermes" me ha parecido mucho más interesante. Se agradece que sea una chica que sabe lo que quiere y que, viendo lo tímido que es él, le ayuda para que vaya dando pasos. Es inteligente, divertida y simpática. Dudo que alguien así se molestase por cosas superficiales o quisiese que alguien desechase su afición por ella.

El dibujo es sencillo, muy expresivo y diría que un tanto ochentero, lo que le permite crear personajes de muy diferentes fisonomías. También es cierto que no suelo leer mucho seinen por lo que mi opinión aquí está muy limitada. La mayor pega que tengo que poner es el innecesario fanservice de Hermes en algunas portadillas de capítulos.Poco más que añadir. Un romance realista en todos los sentidos, muy natural y emotivo sin caer en melodramas o exceso de azúcar. Sin embargo, no me puedo quitar el regusto amargo que supone el hecho de que él cambia por completo sólo por gustarle a ella, me parece una idea tóxica y una forma de engañar a la otra persona tanto como a ti mismo.