Pues sí, igual que en el lejano oeste americano, nos hemos calzado las botas y calado el sombrero para adentrarnos en la búsqueda de tal preciado material en el mundo decorativo, que es el que nos fascina y ocupa. Y todo con la intención de comprobar si el oro es cosa de antepasados o, por el contrario, tiene cabida en el hogar actual. Y la tiene, ¡vaya si la tiene! Si fuéramos una de esas expertas en lo más "fashion" de cualquier disciplina, diríamos que tener en casa algún detalle o pequeño mueble auxiliar en dorado es un "must have". A nosotras, que no somos nada minimalistas y que el blanco impoluto de algunos hogares tampoco nos va, nos parece que, en su justa medida, aportan cierto toque de sofisticación y un aire chic muy "trendy" (Jo, hoy estamos que nos salimos...) No, no le haríamos ascos a una silla, una mesita o una bandeja en ese color, es más, ya que tenemos el "look" de buscadoras, ¡nos vamos a la caza del dorado para nuestro hogar!
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