Señor Dios de los gatos:
Yo no te pido nada para mi que ya tengo una linda casita y una familia que me quiere. Solo te ruego que cuides de los hermanos gatos que malviven en la calle, proscritos del camino, golpeados, tratados como escoria, insultados y apaleados por la ignorancia humana. Te pido que les consigas, al menos, un techo donde cobijarse en las noches frias y algo, aunque sea poco, para comer. Te pido que les des al menos un amigo con quien sentirse acompañado, y un cielo hermoso, donde correr libres en sus sueños. Y sobre todo te pido les des una muerte digna cuando les llegue el momento de irse.
Fuente: gataruska.blogspot.com