Llega otro 20 de Mayo en el que los Cubanos deberíamos estar de fiesta celebrando el 113 aniversario de nuestra independencia, pero en vez de que sea así, lo estamos celebrando oprimidos por un régimen marxista que ha eliminado todas las libertades que habíamos conseguido, y que reprime, que golpea, que encarcela y que no permite que los Cubanos disfrutemos de los Derechos Humanos que fuimos de los primeros países en suscribir.
En vez de la avanzada Constitución de 1940 que redactó la comisión presidida por Don Carlos Márquez Sterling y que se adelantó a su tiempo en muchos aspectos, hoy vivimos bajo una constitución marxista, donde la mayoría de los derechos que habíamos adquirido han sido eliminados. Pero todavía peor, el mismo gobierno comunista no respeta su constitución y la viola a su conveniencia.
El 20 de Mayo de 1902, Cuba logró su independencia, pero hoy 20 de Mayo de 2015, Cuba no es libre y su libertad no ha sido suprimida por ninguna potencia extranjera, sino por un grupo de malos cubanos que han impuesto una Tiranía Totalitaria Marxista-Leninista que ya ha durado 56 años si lo medimos desde el 1ro. de enero de 1959.
En 1959, cuba no era un país pobre, era un país con una economía emergente, que iba en camino de ser un país desarrollado. Sus índices, como fuera que se midieran, eran de los más avanzados en el mundo, superiores a muchas de las naciones europeas. Cuba tenía una gran clase media, y su población tendía a ser urbana que son dos parámetros básicos para el desarrollo de un país.
Pero los logros sociales y económicos no fueron a la par de los logros políticos. Los gobiernos de la Cuba independiente estuvieron plagados de corrupción, de Golpes de Estado y de todo tipo de inconvenientes. Sin embargo, aun así, Cuba creció y prosperó. Muchos envidiaban el nivel de vida que había logrado Cuba en poco más de 50 años como país independiente.
Pero en 1959, después de haber derrocado la dictadura de Fulgencio Batista, llegó la Revolución de Fidel y Raúl Castro quienes lograron establecer una Tiranía Marxista totalitaria que perdura hasta la fecha. Los avances se perdieron. La clase pudiente emigró. La clase media también emigró o se volvió pobre, y los pobres se hicieron más pobres. La naciente industria desapareció ante la ineficacia de los marxistas expropiadores, se dejó de construir, se paró el tiempo.
Hoy, en 2015, la situación de Cuba es muy inferior a la que tenía en 1959 en casi todos los aspectos. Miles y Miles de muertos solo han logrado un retroceso en nuestro nivel de vida. Hemos perdido las libertades conquistadas. Nos hemos vuelto uno de los países más pobres de América y estamos entre los más pobres del mundo.
Pero como dice el refrán, no hay mal que dure 100 años, ni cuerpo que lo resista, y la pesadilla marxista ya debe terminar. Hace falta un cambio real. Hace falta que los malos gobernantes y dictadores den paso a una nueva generación de cubanos preparados que puedan re-encauzar el desarrollo de Cuba. Raúl Castro lo sabe, pero tiene miedo a perder el poder. Pero el poder de nada sirve si no se utiliza para generar mejoras, cambios positivos, avances y libertad.
Confiemos en que la situación actual nos lleve a un punto de inflexión, para que Cuba vuelva a ser un país del que su gente no quiera emigrar, donde no se gobierne a palos, donde existan oportunidades para crecer profesional y económicamente, donde haya libertad y que pueda lograrse una verdadera reconciliación nacional.
No miremos atrás. Miremos adelante. Lo de atrás ya no lo podemos cambiar, lo que si podemos hacer es construir la Cuba del futuro, y ese debe ser nuestro objetivo.