En el año 1991, unos montañeros se encontraron en los Alpes, la momia de un hombre (denominado actualmente como Otzi), el cual presentaba signos de llevar en aquel lugar cientos de años. Pues bien, las primeras investigaciones arrojaron unos datos realmente sorprendentes. Teníamos ante nosotros un cuerpo de un hombre que vivió y murió hacía unos 5000 años.
Este hallazgo suponía tener la gran oportunidad de estudiar ciertas características de los hombres del neolítico, asentados en centro-Europa: rasgos físicos, vestimentas, armamento, etc. Y, por todo ello, desde el primer momento comenzaron las investigaciones y estudios en relación a ese cuerpo momificado. Las conclusiones a las que se ha llegado han sido realmente valiosas para conocer un poco mejor la vida de nuestro antepasados. En primer lugar me gustaría destacar la presencia de tatuajes en su cuerpo, algo que está hoy en día muy de moda, sobre todo entre la juventud. Pues hace 5000 años los humanos ya se tatuaban su cuerpo. Por otro lado, y en relación a las vestimentas que llevaba con el fin de protegerse del intenso frío alpino, estas estaban realizadas con fibra vegetal y pieles de distintos animales como el oso, ciervo o cabra. Además, los zapatos, parece ser, eran impermeables, es decir, estaban realizados expresamente para andar por la nieve. Hecho que nos índica un tipo de perfeccionamiento bastante alto en relación a este tipo de vestimenta. En tercer lugar, y comentando el tema del armamento, cabe reseñar que Otzi disponía de un cuchillo de pedernal, un hacha de cobre, un arco y flechas. Además, Otzi, murió por una flecha que tenía clavada en un pulmón. En este punto vamos a enlazar con otros dos. Por una parte, y debido a los restos de sangre hallados en su vestimentas y armas sabemos que no iba sólo, aunque no podemos determinar, como es evidente, el número exacto de personas, ni tampoco, si su grupo fue atacado en la montaña o estaban en guerra con otras comunidades de la zona. Por otra parte, se han hallado en la herida de flecha que tenía en el tórax resto de un musgo que pudo utilizar como planta medicinal, lo que nos índica que podía tener importantes conocimientos de plantas medicinales, así como, de medicina en general. Por último, estos días ha aparecido un nuevo hallazgo sobre Otzi, y es, lo que comió por última vez. Los investigadores, debido al análisis de su sistema digestivo han llegado a la conclusión de que el último alimento que ingirió Otzi fue carne de cabra curada pero cruda, es decir, algo parecido al jamón actual, pero en vez de cerdo de cabra. Hace 5000 años, se puede decir que, ya sabían curar la carne para transportarla.
En definitiva, Otzi, es, ha sido y será, un hallazgo que no deja de sorprendernos y que nos ha aportado numerosa información respecto a la vida que hace 5000 años llevaban nuestros antepasados. Y ante todo, yo quiero hacer una reflexión: “Sin nuestros antepasados, nosotros no seriamos lo que somos hoy en día”.