#OverlyLove 5: Entre más mal lo paso, más lo amo

Por @p0ps_ desde Chile"Amar demasiado nosignifica amar a demasiados hombres, ni enamorarse con demasiadafrecuencia, ni sentir un amor genuino demasiado profundo por otro ser.En verdad significa obsesionarse por un hombre y llamar a esa obsesión“amor”, permitiendo que esta controle nuestras emociones y gran partede nuestra conducta y, si bien comprendemos que ejerce unainfluencia negativa sobre nuestra salud y nuestro bienestar, nos sentimosincapaces de librarnos de ella. Significa medir nuestro amor por laprofundidad de nuestro tormento."

Así de obsesivo es a veces el amor. Y las mujeres somos vulnerables a ese amor/desamor. Es frecuente escuchar entre los grupos de mujeres, sobretodo en las de clase social media-baja, frases de conformidad frente a sus relaciones amorosas: "No importa que tome, al menos toma acá en la casa"; "No importa que llegue tarde, si al otro día estará todo el día conmigo"; "No puedo separarme de él porque es parte del sustento de mi hogar, no puedo sola con todo", "Es el papá de mis hijos, no puedo dejar a mis hijos sin su padre, yo lo hago por ellos". Es ahí cuando empieza la compasión exterior "todo lo de los demás, es más terrible que lo que vivo". 
Muchas mujeres teniendo todo, absolutamente todo para ser felices (proyectos personales, trabajo estable, carrera profesional, independencia económica, etc.) eligen quedarse en ciertas relaciones por el solo hecho de querer "salvar" a ese hombre que está perdido en la vida, porque juramos que nuestro amor es capaz de cambiarlo, hasta tal punto que algunas llegan a concretar "ciertos" planes para retenerlos aún más (matrimonios, embarazos, enfermedades, etc.). Hay mujeres que se obsesionan con un hombre y son capaces de hacer lo que sea por mantenerlos a su lado, y dejan de verse ellas mismas, de valorarse y de quererse.Una vez leí en un libro de religión "Ama más y mejor quien primero dice: la culpa la tuve yo". ¡Horrible! Y puedo decir, vergonzosamente, que durante mucho tiempo pensé que era así. De ese modo, me vi mil veces echándome la culpa de un montón de cosas que ni siquiera había pensado hacer (al menos no conscientemente), porque el amor me engrandecía, entonces, yo lo amaba más, porque era capaz de reconocer, en el conflicto, mi grado de responsabilidad antes que él.

Las mujeres que amamos demasiado somos mujeres controladoras. Si la culpa es nuestra, también tenemos el control, entonces, puedo hacer que el dolor desaparezca. Y no es así, claro que no lo es. Como dije en otro OverlyLove, cada uno es responsable de la relación que construye, tú eres tan responsable como el otro de los conflictos que viven. Si ves que estás sufriendo demasiado por amor, que te responsabilizas por los actos del otro a cada rato, que te sientes mal física y emocionalmente, entonces debes sentarte a pensar qué parte de ti, de verdad, quiere esto para el resto de su vida. En verdad, es sano mantener una relación de ese modo. Las personas cambian, es cierto, pero nunca tanto, es altamente posible que tú no logres hacer que el señor en cuestión cambie aquello que a ti no te gusta. Y si a ti no te gusta, por qué no mejor buscar algo que si te guste. El amor no es sufrir sin medida. No amas más profundamente porque sientes con el alma cada conflicto que tienen. Lo más probable es que estés obsesionada con eso que quieres lograr, pero te has olvidado de ti misma y de lo que quieres para ti. *Columna basada en "Mujeres que aman demasiado" Norvin Norwood.