Revista Diario
Hace años yo fui donante de óvulos, antes de saber mis problemas para quedarme embarazada en su día escribí sobre ello AQUÍ. Quiero tratar de nuevo éste tema porque hace un tiempo vengo recibiendo unos mails de una lectora anónima en los que se me plantea la ovodonación como algo distinto a lo que yo pensaba hasta ahora, sinceramente después de leer tantos artículos al respecto, empiezo a verlo de distinta forma, quiero decir que un poco ha abierto una heridita. La lectora anónima que me escribe, a la cual yo contesto a todos y cada uno de sus mails, empezó diciéndome que se sentía mal por saber que por ahí podía haber algún "hijo suyo", parte de sus genes están en algún lugar, en un niño o una niña que un día fueron concebidos por ovodonación. No os puedo negar, que yo como donante también he pensado muchas veces en ello, pero no sé hasta qué punto tendría derecho a saber más.Yo acepté las reglas, yo doné de manera consciente y sabiendo que mi identidad siempre sería anónima, y la mujer que recibió mis ovocitos sería anónima para mi también. Pero supe algo que hubiera preferido no saber, y es que finalmente la receptora se quedó embarazada. Que el embarazo no haya seguido adelante , que haya tenido un aborto natural por ejemplo, eso no lo puedo saber, pero no lo pienso. De hecho lo que pienso es que por ahí, en algún lugar hay un niño o una niña que lleva mis genes, y ahora calculo que debe tener unos 11 años aprox. Ahora bien, yo no soy su madre, su madre es la que lo ha llevado esos 9 meses en su vientre, la que lo ha cuidado, mimado, educado, alimentado y querido, esa es su madre, yo solo soy la donante, alguien que lleva sus genes, podemos compartir un parecido físico, un mismo carácter y desgraciadamente hasta alguna enfermedad, como mi cáncer de mama o mi cáncer de tiroides en un futuro(ojalá que no), pero eso es todo, no hay mayor vínculo que ese, simplemente porque no nos conocemos o ni siquiera sabemos de la existencia el uno de la otra. Y ahí es donde quería ir a parar...¿deberíamos saberlo? En países como Reino Unido la ley ante el anonimato en la donación de esperma o de óvulos ha cambiado y en otros países está cambiando, pero en España no. En algunos países se valora más las futuras secuelas psicológicas que pueden dejar a un niño o niña concebidos con donante al enterarse de la verdad , que el dinero que genera cada tratamiento de fertilidad con donación de esperma u ovodonación. Estamos hablando de un negocio que mueve millones de euros en España y en el resto del mundo, si se hiciera publico el donante o la donante...el negocio podría irse a pique. Pero centrémonos en mi caso como donante. Hasta ahora no me había planteado que algún día, en un futuro, ese hij@ quiera conocerme, pero eso sería prácticamente imposible porque en la clínica dudo que mis datos pudieran hacerse públicos. ¿Pero y si lo fueran? No me imagino un día abriendo la puerta y viendo a alguien que dice ser mi hij@... sí, no dejaría de ser una sorpresa pero...tiene que ser tan duro para la que abre la puerta como para el/la que pica al timbre. No me puedo imaginar esa situación...¿qué decir en ese momento, cómo explicarle cuando quiera explicaciones? y al fin y al cabo...si hay que contestar a tantas preguntas que pudieran formularme...estaríamos creando un vínculo que de entrada preferiría no crear... Y no hablo ya por mi, sino que pienso en los padres que han criado a ese niñ@, no puedo ni imaginar lo que tendrían que pasar si su hij@ quisiera conocer de dónde vienen sus genes. ¿Y si un día se lo cuento a mi hija y mi hija decide buscar es@ herman@? esto también podría pasar, no es algo tan descabellado. Porque ellos serían hermanos, parte de sus genes serían los mismos...y en mi caso, ¿sería conveniente que yo fuera a la clínica para notificar mis enfermedades para que avisaran a aquella familia y estuvieran alerta en un futuro? ¿Qué hay que hacer en estos casos? Cuantas preguntas sin respuesta. Esta lectora anónima me dice que quiere buscar a ese hijo o hija que pueda tener por ahí, que tienen derecho a saber de ella. Ha pensado en ir a la clínica y dejar una autorización para si un día quieren conocerla que no lo duden. Ella insiste que esos niños tienen derecho a saber la verdad...pero la verdad ¿qué implica?¿Acaso vas a tener algún derecho sobre él o ella? yo creo que no...¿y tu estás preparada para decirle a la cara el por qué lo hiciste? no es lo mismo saberlo una misma que decírselo a quien nació de tu óvulo, no es lo mismo. Gracias a ésta lectora anónima, he descubierto algunas pág en las que se trata sobre estos temas, son chicos y chicas nacidos por donaciones de esperma y donación de óvulos que cuentan su experiencia, es algo desgarrador leer alguna de esas historias, sinceramente. y todos en general tiene algo en común, quieren conocer a sus respectivos, según he leído a muchos les daría tranquilidad el saber porqué no se parecen a sus padres ni en físico ni en carácter, si conocieran al/la donante. He leído testimonios tan duros como estos: -Una mujer descubrió a los 13 años que fue concebida por donantes. Y para sorpresa de su madre, eso le provocó angustia:“El deseo de conocer a mi padre biológico no ha disminuido con los años. [Aunque no le conozco] lo cierto es que no me cae especialmente bien desde que aceptó hacer de padre a cambio de dinero y prometió no investigar qué sería de mí, y aceptó ese acuerdo como un buen trato... No quiero su cariño ni deseo llamarle ‘papá’; yo ya tengo un padre. Tampoco quiero aparecer en su tarjetón de Navidad ni deseo robarle su valioso tiempo. Sólo quiero saber quién es.” -Otra mujer joven se siente molesta al saber que no fue concebida como fruto de un acto de amor, sino fabricada como un producto:“Soy un ser humano. Sin embargo, fui concebida con una técnica que al principio se usó para la cría de animales. Peor aún: los granjeros conservaban mejor los expedientes genealógicos de su ganado que las clínicas de reproducción asistida. También me hace sentirme extraña pensar que mis genes son la suma de los de dos personas que nunca se quisieron, nunca bailaron juntas, y ni siquiera se conocen.” Os dejo esos links por si alguien quiere echar un vistazo a estas páginas "El dolor de los concedidos de forma anónima" , "Historias de anónimos concebidos por donación" (ésta última está en inglés, pero podéis utilizar la herramienta de traducción). ¿Qué pensáis al respecto vosotr@s?