Autor: Piero Degli Antoni
Género: Thriller psicológico
Editorial: Suma de letras
Páginas: 320
Precio: 17€ (8'99€ en ebook)
Sinopsis:
Mützen ab! Dos simples palabras pueden transportar al pasado.
Eso es lo que sintió Moshe cuando volvió a escucharlas muchos años después.
Sintió el frío de Auschwitz, el terror de la voz de los oficiales y el olor fétido de la muerte.
Auschwitz, 1944. Debido a la fuga de unos prisioneros y como castigo ejemplar para el resto, diez personas son recluidas en una celda del pabellón 11 para ser asesinadas al día siguiente. Pero un repentino cambio de decisión por parte del Kommandant altera los planes: solo morirá uno, pero serán ellos mismos los que decidan quién. Comienza así una lucha encarnizada en la que valorar quién merece vivir y quién merece morir no resulta tan sencillo como en un principio parecía.
En el otro lado del campo, el Kommandant ve cada vez más claro que la guerra está llegando a un final trágico, y se pasa la noche jugando con su hijo una partida de ajedrez que resulta ser un terrible espejo de la realidad.
La lucha por la supervivencia y la parcialidad de la bondad y la maldad del hombre componen el engranaje de este thriller psicológico apasionante a la vez que profundamente humano.
Opinión de MJ:
No suelo leer libros ambientados en guerras porque ya tengo bastante con mi carrera, pero como salió elegido en el Club de Lectura de Vogue, lo tuve que leer y debo decir que doy gracias a la chica que lo propuso. Fue una gran lectura.
La historia está ambientada en un campo de concentración nazi durante la II Guerra Mundial. Al principio el autor nos narra cómo se vivía (o mejor dícho cómo se sobrevivía), nos muestra que no todos los presos eran iguales, había como una especie de jerarquía basada en favores que podia suponer que tu ración de comida fuese mayor, que no te diesen palizas, tener algo más de ropa, etc. Incluso también nos relata la historia desde el punto de vista de algunos nazis para que se pueda ver el contraste, e incluso, en algunas ocasiones, lo parecidos que eran.
No puedo adentrarme en personajes porque hay muchos, están los diez presos, el comandante, su hijo, su mujer y algunos nazis más. Además de ser muy largo creo que quitaría ciertas sorpresas que guardan las páginas del libro, ya que después de las presentaciones (gran parte del libro porque el autor presenta a sus personajes en el momento preciso y no al principio de golpe y porrazo), parece que el lector tiene muy claro quién debe ser ejecutado y quién no, pero según van pasando los capítulos y cada uno cuenta la historia de su vida... ¿Quién está libre de pecado? Si nadie puede lanzar esa primera piedra, ¿cómo señalar a uno? Ahí está el quid de la cuestión. Todos están ahí por algo aunque no lo saben.
El libro está dividido en horas, siendo cada hora un capítulo; o para ser más exacta, al principio los capítulos están bien separados pero sin título, para luego, cuando son encarcelados, hacer de cada capítulo una hora pasada allí para crear un ambiente de claustrofobia, de irreversibilidad que atrapa a la persona que tenga el libro entre manos y no pueda dejarlo de lado. Porque sí, porque es absorbente, lo leí en una sola noche.
Es una novela dura en ocasiones por la vida que tuvieron que llevar algunos, por lo que se vieron obligados a hacer para sobrevivir, por las inhumanas condiciones que soportaron en el campo de trabajo, por el odio visceral de nazis que sobrellevaban en su piel por las incesantes palizas, violaciones... No todo el libro es así, ni mucho menos, pero tiene sus partes duras que el autor no se ahorra.
Aunque me lo leí en una noche y me gustó mucho, también debo decir que el final es un tanto precipitado. Personalmente creo que deja dos preguntas sin respuestas (al menos en parte) y no me gustó. Ya he dicho que no solo se narra lo que les ocurre a los presos, sino también a ciertos personajes nazis. Pues bien, uno de ellos sería el comandante y su familia, los cuales juegan un papel muy importante en la trama junto con la partida de ajedrez que juega el niño con su padre (comandante). No diré más pero esa partida es muy importante, partida que el autor no explica cómo pudo llevarse a cabo, cómo tenía tanta información de dichos presos cuando llegaban a cientos (incluso miles) en los trenes. Cómo pudo montar tamaña 'partida de ajedrez'.
Otro aspecto que no me cuajó del todo fue que se salta cierta acción final de la historia. Hubiese estado muy bien que el autor la relatase no por la acción, sino por saber cómo le fue a cada personaje durante esas horas. Vale que al final del libro intenta arreglarlo con algunos párrafos, pero no es lo mismo.
A l@s amantes de las historias ambientadas en esta época os digo que es indispensable, a l@s amantes de los libros de misterio y thriller psicológico os digo lo mismo (ya que más que un libro de nazis y judíos es una novela de misterio, el campo de concentración solo sirve de ambientación, de escenario); y al resto igual porque como digo, está escrito de tal manera que no haces más que cambiar de parecer, con grandes giros argumentales y con una historia tan bien montada y tan bonita que os gustará.
Es de lectura obligatoria.
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