La pachira aquatica es conocida por diferentes nombres comunes como: Pachira, Castaña de agua, Castaña de la Guayana, Castaño de Guayana, Ceibo de agua, Cacao silvestre, Castaño de agua. Pertenece a la familia de las Bombáceas (Bombacaceae).
La pachira es un árbol oriundo de las zonas pantanosas de los trópicos americanos (México y el norte de Suramérica), que se ha adaptado perfectamente al cultivo en el interior e incluso como bonsái.
Plantada en el suelo del jardín crece rápidamente y puede alcanzar los cinco metros de altura.
Sus hojas son palmeadas y están formadas por cinco o seis foliolos ovalados o elípticos (pueden llegar a ser incluso nueve), de unos 30 centímetros de largo; son lustrosos y de color verde brillante.
La corteza es lisa, de color marrón y verde en las partes más tiernas.
Sus flores son grandes y muy perfumadas; tienen pétalos blancos finos y un penacho de estambres amarillos con los extremos rojos. Dan lugar a grandes frutos leñosos.
Se reproduce por semillas y rara vez por esqueje, ya que éstos deben ser de ramas endurecidas y bajo condiciones determinadas. De todas formas, la semilla germina mejor si tiene algo de calor.
La pachira exige una atmósfera húmeda: las pulverizaciones con agua compensarán la sequedad ambiental, que suele provocar la caída de las hojas. Los problemas más comunes de esta planta son principalmente debidos al exceso de agua.
Plantada en el suelo del jardín crece rápidamente y puede alcanzar los cinco metros de altura.
Como planta de interior, la pachira se presenta con los tallos trenzados.
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