El Partido Animalista ha enviado una carta en el Ayuntamiento de Mataró para solicitar información y pedir que se negocie con la spAm para no cerrar su refugio de calle Galícia
Hace seis días se conoció la noticia. El Ayuntamiento de Mataró (Barcelona) ha decidido cerrar el refugio gestionado por la spAm en la calle Galícia y trasladar el servicio al CAAC Maresme de Argentona a partir de marzo. Sin opción para hacer una contrapropuesta, y después de dos meses de peticiones de información por parte de la spAm sobre si se prorrogaría su contrato con el Ayuntamiento, el consistorio sólo ha comunicado el plan de cambiar el servicio. En seis días ya hay 15 mil firmas en contra del cierre a la plataforma Change.org y, por parte de PACMA, todavía no se ha recibido una respuesta del consistorio.
Desde PACMA consideramos que este cese del contrato no está comunicado con antelación suficiente ni se ha abierto ningún canal de comunicación con el consistorio para negociar y/o plantear alternativas al cierre del refugio, ofreciendo el servicio a un precio más económico o trasladándolo a otras instalaciones que gestiona la spAm.
Los motivos argumentados por el consistorio mataronés han sido que las instalaciones de la calle Galícia no están en condiciones óptimas para atender los animales y adaptarlas costaría 500.000 euros y que, adicionalmente los terrenos del CAAC de calle Galícia donde se encuentra ubicado el refugio están afectados por un plan urbanístico.
Sobre urbanismo, se trata del Plan parcial de delimitación del suelo urbanizable no programado, PP31, aprobado inicialmente. Hemos comprobado que el plan prevé que la zona donde actualmente está ubicado el refugio que gestiona la spAm sea un Espacio libre, y según los planos del proyecto quedaría como una vía verde sin que ningún equipamiento ocupara este espacio.
Sobre el precio de adecuar las instalaciones, nos remitimos a la spAm que considera, según totMataró, que: “No tiene sentido afirmar que no hay presupuesto para llevar adelante la reforma y que el ayuntamiento sí tenga previsto asumir en primer lugar el coste de derrocar el centro de la spAm y, además, en segundo lugar construir unas instalaciones deportivas” además de añadir que: “La spAm ha invertido una considerable suma que todavía está pagando, puesto que cuando se firmó el primer contrato en 2005 el ayuntamiento entregó las instalaciones del centro en un estado precario y ruinoso donde era imposible acoger animales y trabajar”. Hay que añadir el hecho que, según Sílvia Serra, directora del centro, “llevábamos años insistiendo al ayuntamiento para que un arquitecto o, en su defecto, un aparejador analizara y hiciera un informe sobre las instalaciones, pero sólo nos enviaron un fontanero-cerrajero”.Desde el Partido Animalista consideramos que el cese de este contrato no tiene justificación sólida considerando el prestigio que la spAm se ha ganado en todo todo el territorio nacional por ser un lugar de referencia en bienestar animal. Considerando que los trabajadores de las instalaciones perderán el trabajo, considerando el impacto en la gran cantidad de voluntarios del CAAC de calle Galícia y el impacto en la sociedad fuertemente arraigada a los valores de protección y bienestar animal, así como a educación, que propulsa propulsa la spAm a través de todas sus actividades creemos que lo más oportuno es retomar las negociaciones y tener en cuenta el documento firmado en 2010 donde el Ayuntamiento se comprometía a construir un nuevo espacio en un plazo de entre cinco y siete años para el servicio de la spAm.