Imagen tomada de: http://reflexionesdiarias.wordpress.com/category/padres/
"Queridísimo padre:
Hace poco me preguntaste por qué digo que te tengo miedo. Como de costumbre, no supe darte una respuesta, en parte precisamente por el miedo que te tengo, en parte porque para explicar los motivos de ese miedo necesito muchos pormenores que no puedo tener medianamente resueltos cuando hablo. Y si intento aquí responderte por escrito, sólo será de un modo muy imperfecto, porque el miedo y sus secuelas me disminuyen frente a tí, incluso escribiendo, y porque la amplitud de la materia supera mi memoria y mi capacidad de raciocinio."
Carta al padre. Franz Kafka
Estuve pensando un rato como hacer una entrada a la figura del padre, puesto que hoy se celebra el día en que todos nos acordamos de ellos. Padres de la literatura, padres literarios. Si me quedaba en la literatura española tenía dos posibilidades: hablar de Cervantes como padre de nuestras letras o bien dirigirme a los escritos en los que se hace referencia directa a ellos, Coplas a la muerte de mi padre, de Jorge Manrique, La mortaja, de Delibes... tristes homenajes que esperan a la muerte para hablar de ellos. Si salgo de nuestras fronteras me pasa lo mismo Shakespeare, padre de la literatura inglesa. Autores que hablan de padres, Philip Roth en Patrimonio, más muertes... no me parece una buena idea para hacer de ello una fiesta. Kafka en su carta iracunda, tampoco lo es... casi prefiero pensar en padres de libros, tal vez ahí encuentre lo que busco.
Pienso ahora en el padre de La carretera que huye salvaguardando la vida de su hijo a toda costa, aunque no sepamos su nombre ni hacia dónde se dirigen, ni nos importa. O piense en Dedo polvoriento de Corazón de tinta, dispuesto a cuidar a su hija y salvar a su mujer entrando en un mundo literario. O tal vez, por qué no, en Papá Goriot, que dará todo por lo que quiere. Incluso en El gran Gatsby nos hablaban de los consejos paternos a la hora de hacer o recibir críticas. Pienso también en La sonrisa etrusca y ese padre que ya es abuelo y consigue acercarse al nieto, padres que sacan sonrisas, que abrazan que cuidan. MAUS también nos da el testimonio de un padre. Y más padres literarios, autores otra vez: los griegos, o de Sherlock y la novela de detectives, Doyle. O King que dicen es el padre de la novela moderna de terror porque de la clásica se ha quedado el título Poe y de la gótica, por ejemplo Hawthorne. Porque las paternidades literarias, las de los géneros, las generaciones, los realismos sucios y escritores malditos, esas son para ser discutidas y compartidas. Para el debate. Pero siempre vuelve la misma figura y la misma palabra; Padre.
Hoy celebramos los que tenemos y recordamos los que no tenemos. Hoy no hay libro diario, sólo un recuerdo, o un homenaje un tanto peculiar, a mi manera, entre libros.
Feliz día del padre.
Yo este año no he comprado una corbata sino un libro, El invierno del mundo. Y vosotros, ¿lo celebráis?
Gracias