El Barberini nos ofrece interesantes frescos y los virtuosos trampantojos, omnipresentes en los palacios romanos.
Una vez reseñado el Crates matemático de Giordano, nos fijamos en otra pintura barroca: El Genio de las Artes de Astolfo Petrazzi.Eros, alado y con arco, se nos presenta como genio de las artes y las ciencias. Una esfera armilar, una regla y un compás simbolizan la actividad matemática. Quizá el título no sea el apropiado pues más bien parece otra versión del Triunfo del amor del magistral Caravaggio. La corona, las artes y las ciencias se humillan. Amor vincit omnia había sentenciado Virgilio.
La famosa escala de Borromini, en hélice sobre un ovalo, se visita por una entrada lateral.