Palestinos: más oportunidades perdidas

Autor: Bassam Tawil

Original publicado en Gatestone Institute:

“El presidente de la Autoridad Palestina (AP) Mahmoud Abbas continúa expresando su “deseo” de lograr la paz con Israel sobre la base de una solución de dos estados. No obstante, la facción gobernante Fatah de Abbas y los socios de la OLP, evidentemente tienen una agenda diferente: hacer la guerra a Israel hasta la “liberación de toda Palestina”.

En un discurso pronunciado en su nombre por Riyad Mansour, el enviado palestino ante las Naciones Unidas, el 30 de noviembre, Abbas reiteró su compromiso con una solución de dos estados basada en el derecho internacional y las “fronteras” de 1967.

Abbas pidió a la ONU “forzar a Israel a reconocer el Estado de Palestina basado en las fronteras de 1967 como base para una solución de dos estados, y acordar una demarcación de fronteras en línea con las resoluciones de la comunidad internacional”.

El reclamo de Abbas de un compromiso con la “solución de dos estados” es un elemento básico de sus conversaciones con la comunidad internacional. No está claro quién es Abbas cuando habla sobre el compromiso de los palestinos con una “solución de dos estados”.

Además de su título como presidente de la Autoridad Palestina, Abbas también ostenta los cargos de presidente de la OLP y Fatah, su facción gobernante en Cisjordania. ¿Las declaraciones de Abbas sobre la paz con Israel y el establecimiento de un estado palestino junto a Israel representan a cualquiera de estos tres organismos? Apenas.

El mandato de cuatro años de Abbas (como presidente de la Autoridad Palestina) expiró en enero de 2009. Desde entonces, los palestinos lo consideran un presidente ilegítimo que no tiene autoridad para firmar ningún acuerdo de paz con Israel en nombre de la mayoría de su gente. Muchos palestinos rechazarán legítimamente cualquier acuerdo que firme con Israel sobre la base que Abbas, de 82-años de edad y que se encuentra ahora en su 12 ^º año de su mandato de cuatro años en el cargo, no es un líder legítimo.

En este contexto de confianza cero, cualquier acuerdo que Abbas firme con Israel no valdría la pena el papel en el que está escrito.

Además, la Autoridad Palestina que encabeza no tiene jurisdicción sobre los dos millones de palestinos que viven en la Franja de Gaza o millones de palestinos que residen en países árabes y en otras partes del mundo. A lo sumo, la Autoridad Palestina podría implementar dicho acuerdo solo en aquellas partes que controla en Cisjordania.

Eso es preocupante para la Autoridad Palestina, un organismo autónomo que se estableció de conformidad con los Acuerdos de Oslo de 1993 firmados entre Israel y la OLP.

En cuanto a la OLP, de la cual Abbas es presidente, vale la pena señalar que se trata de una organización paraguas compuesta por varias facciones palestinas. Con la excepción de Fatah, la facción más grande (también encabezada por Abbas), los grupos restantes se oponen enfáticamente a un proceso de paz con Israel. Peor aún, los otros grupos de la OLP continúan abogando por una lucha armada contra Israel.

Tomemos, por ejemplo, el Frente Popular Marxista para la Liberación de Palestina (FPLP), un famoso grupo terrorista de la OLP que no cree en el derecho de Israel a existir y continúa involucrado en el terrorismo. El FPLP nunca pierde la oportunidad de expresar su apoyo a la violencia y el rechazo de cualquier acuerdo de paz con Israel.

Esto es lo que el FPLP piensa sobre los esfuerzos para lograr la paz entre los palestinos e Israel:

• “El FPLP confirma su rechazo categórico a todos los proyectos y soluciones internacionales y árabes que intentan socavar los derechos de los refugiados palestinos y, principalmente, su derecho al retorno, en interés de propuestas consistentes con la visión sionista de este tema fundamental”.

El FPLP, al igual que Hamas y otros grupos palestinos, no oculta su objetivo de “liberar Palestina, del Río (Jordania) al Mar (Mediterráneo)”. Todos deben ser felicitados por su honestidad. Si alguien tiene dudas, su plan significa la destrucción total de Israel.

Otro grupo terrorista de la OLP, el Frente Democrático Leninista para la Liberación de Palestina (FDLP), por ejemplo, es igualmente peligroso y rechaza cualquier acuerdo pacífico con Israel. Esto es lo que el grupo tenía que decir en una reciente declaración que marca el 69 ^º aniversario de la “Nakba” (la “catástrofe”, una referencia al establecimiento de Israel en 1948):

• “Vamos a hacer el 69 ^ºaniversario de la Nakba de un año para liberar a nuestra causa de las ataduras comprometedoras de Oslo, un año de salvación nacional y la movilización de nuestras fuerzas nacionales contra el proyecto sionista en cada pulgada de tierra Palestina.”

Algunos pueden argumentar que tanto el PFLP como el DFLP son grupos relativamente pequeños dentro de la OLP, y que sus palabras son insignificantes. Sin embargo, lo que importa son las acciones de los grupos terroristas, no solo la retórica. Con una larga historia de terrorismo contra Israel, el FPLP y el DFLP nunca aceptarán ningún acuerdo de paz con Israel. ¿Cómo pueden aceptar cualquier acuerdo cuando ya están pidiendo la derogación de los Acuerdos de Oslo?

El FPLP y el FDLP no son los únicos grupos terroristas de la OLP que se oponen a un acuerdo pacífico con Israel. Entre los otros grupos terroristas de la OLP se encuentran: el Partido Popular de Palestina, el Frente de Liberación de Palestina, el Frente de Liberación Árabe y el Frente de Lucha Popular Palestina. Su ideología compartida: el rechazo del derecho de Israel a existir y el compromiso con el terrorismo como una forma de “liberar a toda Palestina”.

Por lo tanto, como presidente de la OLP, Abbas no puede decir que representa a toda la organización. No tiene influencia con el PFLP, el DFLP y los grupos terroristas restantes que operan bajo el paraguas de su OLP. Estos grupos terroristas nunca – nunca – van a firmar un acuerdo de paz entre Abbas e Israel.

Eso nos deja con la facción Fatah dominante de Abbas. Y ahora llegamos a la pregunta del millón: ¿Abbas realmente representa a todo Fatah? La respuesta es simple y clara: No.

En las últimas décadas, Fatah ha sido testigo de fuertes divisiones y disputas, lo que ha resultado en una serie de grupos escindidos que se separaron y ahora desafían abiertamente el liderazgo y las políticas de Abbas.

Las tensiones dentro de Fatah se han intensificado marcadamente en los últimos años, especialmente con la revuelta encabezada por el archirrival de Abbas, Mohammed Dahlan. Dahlan, un ex oficial de Fatah y comandante de seguridad derrocado por Abbas, actualmente tiene su base en los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y cuenta con el respaldo de muchos cuadros palestinos, especialmente en la Franja de Gaza. Dahlan y sus partidarios están trabajando arduamente para sacar a Abbas del poder con la ayuda de los Emiratos Árabes Unidos y algunos países árabes.

Además, las declaraciones de la solución de dos estados de Abbas y sus declaraciones de oposición al terrorismo tampoco reflejan los puntos de vista de algunos de los principales funcionarios y medios de Fatah. Un informe presentado por Palestinian Media Watch al Subcomité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de Estados Unidos sobre el Medio Oriente detalla la incitación y la glorificación del terror contra Israel por parte de Fatah.

Las divisiones dentro de Fatah no están limitadas solo al escalón político; también se extienden a los diversos grupos armados de la facción. Esto significa que Abbas tampoco representa a todos los grupos armados de la facción a la que se supone que se dirige bajo Fatah.

• Aquí, por ejemplo, lo que piensauno de los grupos armados de Fatah, las Brigadas de Mártires de Al Aqsa – Batallón de mártir Nidal Al-Amoudi, sobre la solución de dos estados de Abbas y la paz con Israel: “Prometemos a nuestro pueblo seguir el camino de la lucha armada y el rifle puro hasta la liberación de toda Palestina y sus lugares sagrados “.

Esa declaración del grupo terrorista de Abbas se emitió en la Franja de Gaza el 2 de diciembre. La ocasión: el lanzamiento de un campamento de “entrenamiento” para los terroristas de Fatah que llevan el nombre de Yasser Arafat.

Permítanos aclarar las cosas: mientras Abbas está haciendo ruidos sobre un proceso de paz, su propia facción de Fatah está incitando a la violencia y llamando a la destrucción de Israel. Mientras Abbas habla de su interés en lograr una solución de dos estados, sus socios en la OLP, incluidos el FPLP y el FDLP, piden abiertamente la destrucción de Israel y la defensa de una lucha armada. Mientras que Abbas afirma que es el presidente legítimo de los palestinos, muchos palestinos, incluidos altos funcionarios de su facción Fatah, afirman legítimamente que no tiene el mandato de su pueblo para firmar ningún acuerdo con Israel.

Abbas es un líder fracasado que ha perdido una oportunidad tras otra de guiar a su pueblo hacia una vida mejor y más digna. Si bien sus palabras pueden sonar bien para algunos israelíes y muchos en la comunidad internacional, nos quedamos con la pregunta candente: ¿A quién representa exactamente y en nombre de quién está hablando exactamente? La respuesta es que Abbas es un demagogo de estrategia única cuyo único objetivo es conservar el poder de vender espejismos al mundo hasta su último aliento.”