Madera del guayaco, compacta y de hermoso color rojo oscuro, muy estimada para la construcción de muebles de lujo.
Palisandro es una voz que procede de la suma de "palo" + "santo", por adaptación del francés palissandre. Da nombre a una madera decorativa, muy codiciada, procedente del guayaco, árbol de América tropical, de la familia de las Cigofiláceas, que crece hasta unos doce metros de altura, con tronco grande, ramoso, torcido, de corteza dura, gruesa y pardusco.
Os proponemos un par de ejemplos de uso. El primero de la mano de Enrique Larreta (1875-1961, escritor argentino) en su obra La gloria de don Ramiro:
"...Beatriz pidió su libro de devoción, para meditar, a su modo, el Misterio del día, mientras la aderezaban la lacia cabellera, cuya negrura imitaba a trechos la morada vislumbre del palisandro.
Una cascada de sol, traspasando los vidrios, entraba de sesgo en la estancia. El don rutilante y divino chispeaba en los objetos de plata, en el nácar y el metal de las incrustaciones, en el galón de las colgaduras, cayendo sobre el tapiz como una lluvia de oro de la mitología. Afuera, el resplandor matinal iluminaba las cornisas más altas; y el cielo, sin una nube, iba disipando su niebla..."
...Y el segundo en la obra La regenta, de Leopoldo Alas Clarín (1852-1901, escritor español):
"...Ana, durante las horas del calor, que ya era respetable, subió a su gabinete, y después de leer un poco, tendida sobre el lecho blanco, se acercó al escritorio de palisandro, y hojeó su libro de memorias. Siempre hacía lo mismo; antes de empezar a escribir en él repasaba algunas páginas, a saltos.... Leyó la primera que casi sabía de memoria. La leyó con cariño de artista..."
¡Hasta la próxima lectura! ;-)(Sugerida por... José Luis)