Cuando algo se hace con paciencia y cariño, se nota. Cuando un branding lleva muchas horas de trabajo y quebraderos de cabeza a sus espaldas, se nota.
Pana Chocolate es un buen ejemplo de ello. Se trata de una marca de chocolate australiana, 100 % eco-friendly, que busca transmitir con su imagen ese buen rollito natural que tanto poseen.
No sólo nos ha gustado su packaging, sino también su identidad corporativa y su web tan cuidada. Han logrado un buen equilibrio entre todos sus elementos gráficos con lo que construyen una presencia fuerte y fácil de distinguir. Quizás la clave reside en que todo ha sido ideado por la ilustradora-diseñadora Porsha Marais. Gran descubrimiento.