Pañales de tela y piscina

Hace ya tiempo papá y yo veníamos dándole vueltas a la posibilidad de utilizar pañales de tela con Valeria. Nos parecen más económicos, más ecológicos y además más bonitos que los desechables. Tras unos meses meditando y buscando información y tras unos buenos consejos de Eloísa, estábamos decididos a probar y encontramos una muy buena oferta de pañales de segunda mano en Internet.
Los compramos y nos llegaron la semana pasada. Nos hemos decidido, para empezar, por los pañales todo en uno rellenables, por parecernos la opción más fácil. En concreto, hemos adquirido 6 pañales Blueberry y 9 Bumgenius. En ambos casos son pañales de talla única, se adaptan al cuerpo del bebé desde que nace hasta que deja los pañales con un sencillo sistema de corchetes.
De momento les he dado una lavada y ya están listos, esperando a ser usados. Sólo nos falta, para empezar, que nos lleguen unos complementos que hemos pedido: los forros desechables, la bolsa de transporte y la red.
De momento os puedo contar que hemos visto que el tiempo de secado es un poco más del que esperábamos. Los cobertores sí se han secado deprisa, sobre todo los Bumgenius, en menos de 24h estaban secos. Pero los Blueberry y sobre todo los absorbentes han tardado casi 48h en secarse, con lo cual tendremos que ver cómo nos organizamos y si son suficientes estos pañales o tenemos que hacernos con alguno más. Otra cosa, al lavarlos con un jabón lo más neutro posible y sin olor, algunos pañales al secarse quedan oliendo raro, como ha dicho papá, a queso pecorino, si hay algún entendido en pañales que sepa de algún truquillo para neutralizar el olor a los pañales sin que pierdan la absorbencia, lo agradecemos.
Nos han encantado los diseños y la suavidad de las telas, sobre todo las que quedan en contacto directo con la piel del bebé. Y aunque aún no los hemos estrenado, no me pude resisitir a probarle a Valeria un cobertor encima de uno de sus pañales desechables, le quedaba así de bien:

Examinando la mercancía.

Os iré contando cómo nos va con ellos.
La otra novedad es que el sábado fuimos a la piscina. Yo llevaba deseando darme un chapuzón desde junio del año pasado, pero nació Valeria y con todo el lío pues éste pasado fue el primer verano de mi vida que no me pasé en remojo. Así que, dado que a Valeria le encanta el agua, decidimos probar. Hemos retrasado la visita un par de semanas, pues necesitábamos encontrar unos pañales-bañador y los de las marcas más conocidas los comercializan sólo a partir de 7 u 8 kgs, Valeria no llega a 6, así que esos no le servían. Finalmente hemos encontrado los de Deliplus que son a partir de 6 kgs, creo que también los tiene Carrefour.
Así que el sábado por la tarde nos fuimos súper cargados (bañadores, toallas, gorros, pañales, biberones, etc) a la piscina cubierta dispuestos a probar. Nos metimos los dos en la piscina infantil con Valeria, estaba sorprendida y encantada. No se carcajeaba porque estaba demasiado sorprendida, pero no se asustó, ni lloró y se notaba que disfrutaba, movía las piernas y las manos y daba grititos y cuando cogió un poco de confianza hasta metió la cara en el agua y a partir de ahi toda su fijación era beberse el agua de la piscina XD.
Estuvimos unos 20 minutos, luego decidimos salir, si llega a ser por Valeria nos quedamos más, pero nos pareció suficiente para una primera vez.
Lo pasamos muy bien los tres, tanto que estamos deseando repetir.