Panderetas Mini DiY para Animar Tu Ceremonia

Si estás organizando tu boda, sabrás que cada vez hay más espacios para celebrar la ceremonia en los que no se permite que se arroje arroz, confetti, pétalos de flores o pompas de jabón. El motivo es lógico: ensucian mucho y requieren una limpieza una vez finalizada la ceremonia. Algo que empeora si se celebran varias bodas en el mismo día.
Incluso hay algunos que sí lo admiten, pero que cobran dinero, y no poco, por la posterior limpieza. 

Por eso es interesante valorar otras alternativas para que los invitados puedan celebrar el sí quiero y la salida de los novios. Y deben ser opciones que no manchen, pero que sí sean alegres y divertidas. 

Lo ideal es utilizar luz o sonido para animar ese momento. Si se trata de utilizar la luz (sólo en ceremonias que finalicen con al atardecer o ya anochecido), lo más festivo son las bengalas. No sólo son muy alegres, además son perfectas para conseguir fotos magníficas. Si se trata de sonido, lo más interesante para las bodas son las campanillas y cascabeles. De hecho, la tradición dice que estos sonidos ahuyentan a los malos espíritus y atraen la suerte y la armonía. 

Una forma de utilizar los cascabeles son las wedding wands, que son unas varitas rematadas con cintas de colores y un cascabel, que los invitados agitan para agasajar a los novios.

Y otra, mucho más vistosa, son las panderetas mini. Cada invitado las hará sonar cuando los novios hagan su salida ya como marido y mujer. El sonido es muy agradable y la visión de las manos agitándolas en el aire da mucho juego en las fotografías que inmortalicen ese momento.

Además, son un estupendo recuerdo para los invitados, lo que nunca está de más. Y, no, estas panderetas no son parecidas a los souvenirs para turistas ni las que se utilizan en Navidad o en la Tuna...

Para que aprendas a hacerlas, a continuación te dejo un tutorial que te puede ser útil. Éstas las preparé para una boda de una encantadora pareja, que quería algo diferente para su ceremonia. De hecho, las mini panderetas fueron las que marcaron el leit motiv de la decoración de toda la ceremonia, puesto que utilicé su base para el portaalianzas y las cortinas de atrapasueños en la zona donde los novios dieron el sí quiero. 

Verás qué sencillo es crear unas panderetas mini para tu ceremonia...

Materiales
Bastidor de madera
Puntilla ancha
Remate o puntilla fina
Cascabeles
Pistola de silicona caliente
Tijeras
Alicates
Cómo se hace...
Paso 1
Lo más importante de este paso es la elección del bastidor y de la puntilla. El primero debe ser ajustable y tener un buen acabado. La puntilla debe ser lo suficientemente ancha para poder cubrir el aro interno del bastidor, con un color que encaje en la paleta cromática de la boda y con un motivo atractivo. 
Para estas panderetas mini he elegido un bastidor de 7,5 cm., aunque tú puedes escoger el tamaño que más te guste. Eso sí, te aconsejo que no sea demasiado grande, puesto que debe ser algo manejable y que no ocupe mucho espacio. Es un detalle, no un instrumento musical. Y también debes tener en cuenta que el precio se incrementa de forma palpable cuando aumenta el tamaño del bastidor. 
  
Corta un cuadrado de puntilla que abarque el aro interior, de tal forma que sobre una porción de tejido para poder ajustarlo fácilmente. Ten en cuenta que debe cubrir el borde del aro con holgura. Es mejor recortar después, que quedarte corta y no poder utilizar ese pedazo de puntilla.  

Estira bien el tejido (sin que se deforme) y sujétalo con el aro exterior, de tal forma que quede bien tenso.

Para asegurar la puntilla y que no se mueva, ajusta el aro exterior con el regulador, tal y como puedes ver en la foto. 

Paso 2
Toma la puntilla o remate que hayas elegido y preséntala sobre el aro exterior del bastidor para tomar la medida. Te aconsejo que dejes 1/2 cm. extra, por si te has quedado corta. Ya sabes eso de medir dos veces y cortar una... 

Una vez que tengas la medida del remate, tendrás que ocuparte de los cascabeles. Decide de antemano cuántos quieres poner en cada pandereta y divide el trozo de remate en secciones iguales para poder acomodar todos los cascabeles. No es necesario que utilices muchos, sólo los suficientes para suenen bien y para que queden estéticos.

Para colocarlos, si tu remate es como el mío, que tiene unas pequeñas ondas caladas, puedes emplear unos alicates para colocarlos. Abre el eslabón en el que va colgado cada cascabel y enhébralo en la onda, luego sólo tendrás que cerrarlo con los alicates para asegurarlo. Si tu remate es una cinta o no tiene calados, tendrás que coserlos con aguja e hilo. 

Cuando estén colocados todos los cascabeles, ya sólo tendrás que pegar la cinta con silicona caliente en el aro exterior. Vete haciéndolo poco a poco, para que quede recto y bien pegado. En este caso, como tiene calados, si pones mucha silicona, el exceso rebosará por ellos. Si te sucede esto, ten cuidado de retirarlo (mientras aún está tibio) para que no se vea.

A la hora de pegar el principio y el final del remate, te aconsejo que utilices la punta de unas tijeras. Así los extremos quedarán bien asegurados y en su sitio. 

Como puedes ver el resultado es tan encantador, que no echarás de menos el arroz o el confetti. 


 
Mas ideas...
Portaalianzas
Este mismo sistema lo puedes utilizar para preparar un bonito portaalianzas. En este caso tendrás que sustituir los cascabeles por unas cintas para atar los anillos.
Este de la foto lo confeccioné para esta misma boda, puesto que queríamos utilizar este efecto para homogeneizar la decoración de la ceremonia. Para este portaalianzas elegí un bastidor ovalado, porque era más adecuado para presentarlas, por espacio y por comodidad.
Como esta boda estaba protagonizada por el blanco roto y el azul grisáceo, utilicé puntillas en esos colores. Algunas de ellas estaban teñidas a mano dentro de esa paleta para lograr un efecto más personalizado, buscando un efecto muy vintage y romántico. 

Para asegurar las alianzas escogí un espagueti en un tono azul grisáceo que combinaba a la perfección con la puntilla. Aunque tú puedes emplear cinta de raso u organza o cualquier otro material que te guste.

Para coserlo con más facilidad, le hice un nudo en su parte media a cada una de las cintas. Recuerda que es necesario coserlo por la parte no visible, para que quede más limpio. Puedes darle un punto de silicona caliente (en la zona trasera) una vez que termines para asegurarlos más aún, puesto que la puntilla no es un tejido muy tupido.

El resultado es muy personal. La fecha y el nombre de los novios, puede ir pintado en la parte de dentro del aro interior.  

Cortina de atrapasueños
Y dejo para el final lo que más me gusta de la deco de esta ceremonia: los atrapasueños que empleé para darle un aire de lo más romántico a la zona donde los novios se dieron el sí quiero. 

La forma de hacer estos atrapasueños es la misma que la de las panderetas y el portaalianzas. Sólo debes anudarle un hilo o cinta y colgarlos del lugar que elijas.

Si te gustan estos bastidores, ponte en contacto conmigo y hablamos.
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La primera vez que apareció este post fue en el blog de ¿Quién Dijo Boda?

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