Muchos pensaréis que esa pobre desgraciada que vivió en la época
georgiana, pisoteada por los hombres, no tuvo un buen final. Pero de haber sido así, no os podría contar esta historia, ni jamás conoceríais a las espléndidas mujeres que ocupan estas páginas, ni sabríais del club clandestino que se fundó en pleno corazón de Inglaterra, desafiando a todo y a todos.
Este mes de Marzo se ha publicado la nueva novela de Lena Valenti. Una historia que se sale del género habitual elegido por la autora y se adentra en la histórica. Sumando que es mi época favorita dentro del género y que me he reconciliado con Valenti, tras Amos y Mazmorras, no tuve duda de leerlo.
Nos trasladamos a Inglaterra, al año 1803. Allí vamos a conocer a Kate, la protagonista indiscutible de la novela. Kate es una joven muy adelantada a su tiempo, sus ideas progresistas escandalizan a la alta sociedad y traen de cabeza a su padre. Kate sueña con un país donde se tome en consideración a las mujeres, se acabe con la esclavitud y sobre todo sueña con poder ejercer la medicina, esta es la gran pasión de la joven. Matthew es su prometido. Se conocen desde niños y esa tierna amistad dio paso a un amor y una pasión irrefrenables que los llevará al altar en pocos meses. Todo es felicidad alrededor de la pareja, hasta que un día todo cambia de manera drástica. Kate es acusada de alta traición a la corona inglesa, se la acusa de pasar información a los franceses y de ser amante de nada menos que José Bonaparte. Aún sin saber que ha pasado Kate es apresada, juzgada y condenada a la horca. Pero en el último momento algo sale mal y Kate es salvada y sacada del país. Así comienza Panteras. El argumento ya era de por si muy fuerte, el comienzo de la novela lo es aún más. Pasamos de ver una vida casi idílica a segundos después una familia entera destrozada. Kate una joven admirada y respetada hasta entonces pasa a ser humillada, vilipendiada y arrastrada por un país entero. Su supuesta muerta alegra a muchos y deja con el corazón destrozado a Matthew y su padre, a pesar que ellos en ningún momento la defendieron, no creyeron en ella y no evitaron la tragedia. Es irremediable no enamorarse de Kate desde el minuto uno, sufrir con ella y desear la venganza tanto como ella. Kate regresa a Inglaterra años después para cobrarse su venganza. Llega junto a otras tres mujeres y todas se hacen llamar las Panteras. Ariel, Tess y Marian son las culpables de la transformación de Kate. Ellas cuidaron sus heridas físicas e intentaron cerrar las del alma. Ellas le dieron cobijo, amistad, cariño y sobre todo poder. Poder para acabar con todos aquellos que no creyeron en ella, sobre todo Matthew. En Panteras destaca sobre todo la documentación de la autora. Nos presenta a personajes históricos de muchísima relevancia y lo hace de forma cercana: la realeza, Bonaparte e incluso las hermanas Austen. Que Kate tuviera tal pasión por la medicina es algo que me ha encantado. Autoras como Kat Martin y Amanda Quick apostaron por protagonistas así pero creo que desde ellas no había leído una historia donde se le diera tanta importancia a la profesión de la fémina. El club de las Panteras es otra de las cosas que más me han gustado. Tess, Mariam y Ariel son mujeres independientes, que a base de mucho esfuerzo han logrado ganarse la libertad en un país gobernado por y para los hombres. Tess tiene su propia historia romántica dentro de la novela, creo que no soy la única que hubiera matado por un libro independiente de ella y Abbe. No puedo acabar la reseña sin destacar el sorprendente final. Desde luego yo no me lo esperaba. Ahora, por desgracia, tengo que ir con lo que no me ha gustado de la novela. He tardado casi dos semanas en acabarla. Las primeras páginas fueron arrolladoras pero tras esto creo que la historia sufre un bajón considerable. La estancia fuera del país de Kate pasa de ser interesante a repetitiva y su vuelta al país, para mi gusto, decepcionante. Quizás esperaba mucha más determinación por parte de Kate para vengarse. Sin embargo me encontré con que tanto ella, como el resto de las Panteras, ponían mucho más ahínco en que Inglaterra las conociera que en el motivo principal de su regreso: La venganza. Por último: Matthew. Hay pocas veces que yo no babee por un protagonista masculino y esta es sin duda una de ellas. Matthew es un ser tan voluble, tan veleta...lo vemos al comienzo de la novela y en cierta maneras se sigue viendo a la largo de la historia. Se que no soy la única que hubiera deseado que apareciera un protagonista en condiciones que le robara el corazón a Kate. Otra cosa que me ha molestado un poco a la hora de la lectura es la repetición constante y abusiva de la palabra Panteras. Los sentimientos que transmite Kate al lector hacen que quieras acompañarla en el viaje de la venganza, ella es sin duda el claro ejemplo de una mujer luchadora, un ave que resurge de sus cenizas. Panteras es una novela arrolladora en su inicio y su final. Una historia que nos cuenta el dolor de la traición pero la lucha incansable de una mujer por salvar su imagen, por hacerse valer y por recomponer su corazón roto. Una paseo por la época georgiana y por la unidad de cuatro mujeres para cambiar el mundo. A pesar de esos pequeños "peros" que han echo que no me enamore de estas Panteras lo recomiendo. Creo que a cualquier amante del género le gustará.