Me gusta leer ciencia-ficción y mucho. En los dos últimos años han pasado por mis manos multitud de libros de esa temática. Casi todos ellos de los totems del género.
Prefiero aquellos que hablan sobre la colonización del espacio por parte de los seres humanos o las que abordan la relación con alienígenas. Las últimas novelas de ciencia ficción que he leído trataban sobretodo sobre la colonización. Nosotros, hijos de la tierra, armados con tecnología punta nos dedicábamos a vagar por el universo en busca de nuevos planetas para asentarnos de forma permanente. Esto conllevaba el subsiguiente contacto con una raza alienígena y la interacción entre ambos pueblos,que por lo general, era cordial.
Por norma estoy contra la idea de los alienígenas pacíficos y majos. ¿Por qué? Pues estoy convencida, y nadie podrá hacerme cambiar de parecer, de que la única razón por la que una raza evolucionada se arriesgaría a explorar el infinito universo es porque están muy necesitados.
Veamos. Cualquier pueblo evolucionado tiende a expandirse indefinidamente hasta que los recursos de su entorno se agotan. En ese momento buscará expandirse para conseguir nuevos recursos. Con la tecnología de su parte podrán cubrir grandes distancias. No sólo tendrán la capacidad de moverse por toda la superficie de su planeta sino que también, al haber sustento para todos ellos y una buena sanidad (esto se presupone de cualquier civilización avanzada), el número de individuos crecerá y crecerá. Llegará un momento que el planeta no podrá soportar la presión demográfica.
Una raza medianamente inteligente y previsora vería, con mucha antelación, las consecuencias de ese crecimiento tecnológico y demográfico y haría algo al respecto. Ya sea reciclando, usando energías renovables, controles de natalidad, etc... Sin embargo no creo que la inteligencia sea sinónimo de previsión. Seguramente la raza evolucionada no empezará a pensar en la conquista del espacio hasta que el lobo llame a su puerta transformado en hambre, superpoblación, contaminación, desertización... Entonces, y solo entonces, se preocuparan por invertir en la conquista espacial.
¿Por qué? Porque la supervivencia de la raza depende de ello. O lo hacen o desaparecen. Esa es la motivación necesaria para que la tecnología avance a pasos agigantados. Así pues, tenemos a una raza alienígena inteligente y desesperada que busca salir de su planeta echando leches. Los pobres, necesitan un sitio donde quedarse o del que aprovecharse.
¿Qué haces si tienes un planeta delante altamente apetitoso? Sabes que los inquilinos actuales (tecnológicamente inferiores o más bien sin armas que te puedan preocupar seriamente) no te lo van a dejar por las buenas, tú no lo harías. Además tu pueblo está que trina, tienen hambre, sed, se amotinan... a este paso moriréis en el puñetero espacio. ¿Qué haces? Pues te lanzas como un grupo de leonas sobre una cebra, a la yugular. Por eso creo que los alienígenas que vengan a nuestra pequeña bola azul lo harán con aviesas intenciones. Nada de mariconadas tipo E.T. Hablamos de bichos tipo Independence Day o V (la vieja serie).
Si algún día los humanos surcamos las estrellas seguramente será porque la tierra está en las últimas. Nunca nos preocuparemos de salir de esta roca a no ser que ya no se pueda vivir en ella. Eso dice mucho de nosotros como especie.