Revista Cultura y Ocio

Para ser profesor hoy

Publicado el 18 febrero 2016 por Valadares
Para profesorAntes de dejaros la receta dejar claro que no hay una fórmula mágica, una receta para todo tiempo y momento, una unión perpetua de ingredientes que garantice el éxito. Y que tampoco será válida para todo el mundo, porque nunca mejor dicho aquello de que “cada maestrillo tiene su librillo”. Así que aquí os dejo la receta base para ser profesor hoy, algo siempre se podrá quitar o añadir, eso irá ya a gusto de cada uno y a los resultados que quiera y pueda conseguir. Lo bueno y lo malo de este receta es que no siempre sale bien y por mucho que pongas a veces hay elementos externos que hacen que no funcione, pero aun así hay que seguir intentándolo y más de una vez saldrá perfectamente. Otras no lo hará, pero eso no puede hacer que no lo sigas intentando.INGREDIENTES: Lo primero y más necesario es tener un buen bol de vocación donde mezclarlo todo, cuanto más grande mejor, eso es fundamental porque con él tienes buena parte del resultado conseguido. Pero no llega solamente con eso, así que además tendremos que añadir, casi a partes iguales, lo siguiente:-   Cercanía emocional (para entender, o intentarlo, a todos y cada uno de las personas con las que vas a tener que trabajar, seres individuales cada uno con su forma de ser)-   Distancia emocional (importante, y no opuesto al anterior; es la única manera de que las cosas no te las lleves siempre para casa, aunque es complicado y a veces imposible, porque cada día te vas a encontrar con nuevos problemas de tu alumnado, y no solo docentes)-   Conocimientos (de este ingrediente no podemos pecar ni por exceso ni por defecto; con algunos tendrás que añadir más y con otros menos, pero siempre poco a poco, al ritmo que podamos ir marcando entre todos y lo más lejos posible del famoso concepto de “lección magistral”)-   Sabiduría para transmitirlos (este ingrediente está directamente relacionado con el anterior, de nada vale saber mucho si no eres capaz de comunicarlo)-   Alegría (que nada te deje caer en la monotonía ni el aburrimiento, no vas a clase a entretenerlos, pero siempre habrá mejor ambiente si tú estás disfrutando, tranquilo y contento)-   Optimismo (importante para no dejarse vencer por las constantes dificultades que tendrás que afrontar)-   Paciencia (igual de este hay días que tienes que echar un poco más que otros, o momentos del día en los que te va a hacer más falta, como se gasta antes hay que tener una buena cantidad guardada)-   Comprensión (no todos somos iguales todos los días en todo momento, este te hará falta para capear temporales, para educar y corregir en vez de castigar)-   Capacidad crítica (en las dos direcciones, de ellos y ellas hacia ti y viceversa, tú tienes que serlo contigo mismo y ellos consigo mismos, que aprendan a razonar y pensar por sí mismos; eso es algo que también se aprende, no les pongamos los peces en el sedal, que lleguen a pescar ellos mismos)-   Respeto (al igual que el anterior en dos direcciones, o incluso en tres: de ellos hacia ti, de ti hacia ellos y también entre ellos)-   Adaptación metodológica (estar al día es fundamental para ir mejorando la receta día a día, la receta de hace diez años no puede ser la misma que la de ahora o la de dentro de otros diez)-   Innovación y cambio (los tiempos avanzan que es una barbaridad, al igual que con el ingrediente anterior hay que ir buscando nuevos caminos, nuevas vías, nuevos métodos…)-   Profesionalidad (es tu trabajo y debes realizarlo con la mayor seriedad posible, ser consciente de que estás formando personas y no solo enciclopedias, son individuos que un día saldrán fuera del centro y tendrán que enfrentarse al mundo, cuanto más y mejor los prepares para todo lo que puedan encontrar mejor les irá)-   Flexibilidad (para poder entender mejormuchas cosas, ser rígidos y demasiado estrictos no nos llevará a un buen resultado)-   Individualidad (fundamental saber que quien va a recibir todo esto es una persona individual, a unos les gustará más una cosa y a otros otra, unos tendrán necesidad de más ración y otros de menos, pero sin olvidarnos de ninguno)      Podéis ver un par de vídeos AQUI y AQUI relacionados con todo esoELABORACIÓNPARA SER PROFESOR HOYMezclamos todos los ingredientes más o menos a partes iguales hasta obtener una buena mezcla, homogénea y consistente. Tenemos que ser conscientes de que esta es una receta no solo diaria, sino que puede variar de un momento a otro, de un grupo a otro. Por eso tenemos que tener una buena cantidad de todos los ingredientes para ir añadiendo o quitando ciertas cantidades de uno u otro en base a lo que puedas necesitar en cada momento. Eso es algo que irás aprendiendo con la experiencia, pero no te puedes dejar ninguno o el resultado no será equilibrado ni sabroso. Todos ellos deberán ir aderezados con un buen descanso (las ocho famosas horas de sueño), una buena ducha y un reparador desayuno. Todo eso nos ayudará a preparar la receta en las mejores condiciones posibles.Hay que tener cuidado con la mezcla para que no predominen unos sabores sobre los otros. Hay que tender a buscar el equilibrio perfecto entre todos ellos. Si en un momento dado abusamos demasiado de alguno podemos estropear el resultado y convertirnos en un robot escupe conocimientos o en algo cercano a un payaso de circo.Es fundamental que el preparado les dé seguridad en ellos mismos y la capacidad para ser individuos que sean capaces de pensar por ellos mismos, de sacar sus propias conclusiones y no repetir todo como borregos. No es solo una receta de conocimientos, sino de formación de personalidades.Esta receta, como casi todas, es susceptible de ir mejorando con el tiempo y debe hacerse. Aprendemos cosas que podemos ir incorporando, vemos cosas que funcionan y otras que no tanto, así que tendremos que ir añadiendo y quitando, pensar que siempre puede haber ingredientes nuevos.
Al mismo tiempo cada comensal necesitará mayor o menor cantidad de alguno de estos ingredientes. Las proporciones no dependen del cocinero, sino de la persona que recibe el plato. Casi cada uno necesitará su propia receta y no hay recetas universales. Esto a veces no es fácil, sobre todo si tienes que cocinar para un grupo grande. Evidentemente a unos les gustará más que a otros, pero la señal de que eres un buen cocinero viene años después. Viene cuando te encuentras a esos comensales y te saludan con una sonrisa en la boca, cuanto te cuentan cómo les va la vida y compruebas que el sabor de ese plato que les has puesto a muchos aún les provoca grandes sensaciones, como si no se hubiera ido nunca de sus bocas.
FUENTEShttp://periodicoedukt.blogspot.com.es/2010/02/recetas-para-ser-un-buen-maestro.htmlhttp://entre-sonrisas.blogspot.com.es/2012/03/receta-para-ser-un-buen-maestroa.htmlhttp://www.maestrasjardineras.com.ar/receta.html

Volver a la Portada de Logo Paperblog