Se encuentra en la antigua finca de la familia Desvalls. Iniciado en 1794 y acabado en su primera fase en 1808. Lo primero que nos encontramos al entrar en el recinto y antes de entrar en el Laberinto, es el Palau Alfarràs.

Si seguimos un poquito más podremos contemplar una puerta China, y el Jardí dels Boixos, con una puerta que da acceso al interior del Jardín.





Las obras del Parc, se iniciaron a finales del S.XIX, cuando Joan Antoni Desvalls, marqués de Llupià y marqués consorte de Alfarrás, creó el diseño de un jardín neoclásico con la colaboración del arquitecto italiano Domenico Bagutti. Las obras fueron a cargo de Jaume y Andreu Valls y del jardinero francés Joseph Delvalet.
Continuamos un poquito más caminando por los jardines y entrando en la naturaleza nos encontramos con esta "casita", que en realidad en su interior guarda un antigua fuente de agua.


Y por fin, llegamos a la entrada del Laberinto, donde podemos contemplar una representación del Hilo de Ariadna, para que no nos perdamos en el interior del Laberinto.


Una vez dentro el primer reto es llegar a la parte central...
"derecha, izquierda, no por aquí no, por allí, no por allí ya hemos pasado, y ahora volvemos hacia atrás, y después volvemos, pues no, nos hemos equivocado otra vez...."
Y llegamos a la zona central

Continuamos, que queda poco para salir del Laberinto.
Una vez ya se sale del Laberinto, seguimos viendo obras esculturales como la Gruta d'Eco i Narcís, con una pequeña cascada de agua.

Subiendo por unas escaleras podemos ver una panorámica del Laberinto.

Y llegados a este punto, podemos observar más obras escultóricas, en medio de pequeñas fuentes de agua.





Pasear por este recinto es realmente observar una belleza escultural
Ahora nos encontramos con el Pavelló Neoclàssic, desde donde se divisa una panorámica excepcional del recinto y de la ciudad de Barcelona.


Y antes de ir al jardín romántico, podremos ver a la Nimfa, reposando y contemplando la belleza de todo el Parque.



Los jardines fueron escenario de recepciones a los reyes Carlos IV (1802), Fernando VII (1828) y Alfonso XIII (1908).
Y para terminar nuestra excursión por el Parque del Laberint d'Horta, llegamos al Falso Cementerio, donde abunda el color verde de la vegetación.

En 1967, la familia Desvalls cedió el parque al Ayuntamiento de Barcelona, que lo abrió al público en 1971,donde desde entonces ha sufrido algunas restauraciones para la conservación del parque.
Y llegamos al final del recorrido por esta belleza de la Naturaleza y Escultural que nos aporta Horta.
Los Cazadores de Hermes, Andrés (Barcelona Veo Digital), Neus (La Meva Barcelona), Albert, Xavi (Las Cronicas de Thot), Chus, Nuria (BCN Last Call), Maite (Ando Barceloneando), Enrique y Angeles (Milerenda), decidimos ir a esta excursión y terminar con una buena calçotada.
Podeis ver más sobre el Parc del Laberint d'Horta:
- Milerenda : "Parc del Laberint d'Horta"
