Ricardo Tisci ha vuelto a lograrlo.
El desfile resultó deslumbrante, con unos cortes muy fluidos y materiales de Costura utilizados sabiamente, que se adornaban con plumas de avestruz, buitre y ñandú.
El moderno erotismo que transmiten sus propuestas nos trasladan sin embargo a los años 70 y Helmut Newton.
Tisci no presenta mujeres, presenta espíritus. Fantasmas que pululan delicados y etéreos. Bordados y encajes negros armonizan la colección dándole ese toque gótico que define a Tisci.
Una capa azul transparente cubre sin tapar un sujetador bordado. Delicado y sutil. O no tanto.