Lo primero que hice fue coger el metro para ir a la "Ile de la Cité" y visitar la catedral de Notre Dame. Este año se celebra el 850 aniversario del monumento.
Después visité el palacio de justicia, la fuente de St. Michel, la iglesia de St. Severine y el museo de la Edad Media.
A un paso del museo de la Edad Media está La Sorbona. Impresionan sus edificios y el ambiente universitario. Después fui al Pantheon, que estaba en obras, y a la iglesia de Santa Genoveva.
Para reponer fuerzas, y de paso entrar en calor, fui a un restaurante ubicado en 6 rue Descartes, se llama Le Petit Cafe. La comida estaba riquísima, no era para nada cara, el pan estaba delicioso (algo que me encanta de Francia, en general, son los panes), los platos estaban repletos de comida y el servicio genial. Los camareros fueron muy atentos y amables. Aquí las fotos de lo que me metí entre pecho y espalda jaja
Una vez recobré las fuerzas para continuar me dirigí a la "Tour Montparnasse", los Jardines de Luxemburgo, el Senado, la "Fontaine Médicis" y el teatro Odeon.
Otra de las cosas que me encanta de Paris son las fachadas con los ventanales y los balcones colmados de flores. Todos del mismo color.
Tras visitar la zona de Odeon me dirigí al museo de Louvre.
A esas horas ya no podía con mi alma, así que me fui a casa a descansar y después continué mi "excursión" por los grandes almacenes "Galeries Lafayette" y "Printemps", donde subimos a la última planta para divisar el bello atardecer parisino.
Como habéis visto no paré quieta, y aún me quedaron fuerzas para salir a tomar una copa con mis amigas por la zona de Moulin Rouge. París me encanta. ¡¡Estoy deseando volver!!
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