Un Parque Nacional no excesivamente grande, pero que se caracteriza por tener unas diferencias de nivel enormes (4.500 metros aprox.), por lo que puedes encontrar variados tipos de ecosistemas. Desde su pico más alto, el Illampu con 5519 metros hasta la zona baja, podemos encontrar nevados andinos, glaciares, praderas, páramos, bosque húmedo y yungas entre otros.
La carretera por la que fuimos, y que nos llevó a Coroico, donde hicimos base para el curso de formación al que íbamos a participar, nos fue lanzando paisajes de lo más diverso, algunos de ellos con una sensación marciana que te dejaban boquiabierto. "Paralela" a esta vía se encuentra la famosísima carretera camino a los Yungas, o más conocida popularmente "carretera de la muerte", popular por los antaño frecuentes accidentes de minibus, con un promedio de muertos de 96 anuales en unos 209 accidentes de tránsito.
Ahí se puede ver el perfil de la carretera de la muerte
El último día de formación nos llevaron a pasear por el parque, haciendo un pequeño camino hasta una cascada llamada Yucupi, uno de los muchos saltos que tiene el río Huarinilla a su paso por el Parque Nacional. El camino fue sencillo, atravesando un puente colgante y dándole una visita a un señor de casi 100 años que vive en una casita de piedra en el camino. Un superviviente de la naturaleza!
A la vuelta visitamos una iniciativa comunitaria que consiste en el museo judío de Charobamba, donde te explican la historia de los migrantes judíos que hubo hacia Bolivia en la época de la segunda guerra mundial. Un curioso lugar perdido en mitad de la nada que te cuenta una formidable historia que nunca habrías imaginado.
Museo judío + secadero de coca