Revista Espiritualidad
Faltando pocas horas para que concluya el 2009, es un momento propicio para sentarnos a pasar balance de todo lo acontecido durante el año, y a la vez, verificar cual fue el aprendizaje que obtuvimos de las distintas circunstancias que nos tocó atravesar. También es oportuno revisar si aquellas resoluciones que nos propusimos al finalizar el año pasado fueron cumplidas. Si no fue así, entonces determinar el motivo por el cual no fueron logradas, comprometernos con esas metas para este nuevo año y seguir adelante, olvidando lo pasado.
Quizá este sea uno de mis artículos más personales, pues el 2009 es y será un año que voy a recordar para el resto de mis días, por haber sido un periodo en que enfrenté muchas pruebas, las cuales he superado exitosamente. Esos retos me han enseñado a valorar lo que tengo, y a raíz de las experiencias difíciles experimentadas fue que decidí canalizar esas energías haciendo algo positivo por los demás, lo cual fue iniciar este blog.
Todo lo vivido en el 2009 me ha ayudado enormemente y me siento agradecida de lo acontecido, pues de todo he obtenido enormes enseñanzas que me han hecho una mejor persona, que ha evolucionado y crecido, a la vez que he tenido un cambio positivo de actitud ante la vida. Por fin puedo decir que en el camino de la sanación emocional, me encuentro bien avanzada, reencontrándome conmigo misma. Así lo siento, y así lo perciben las personas que me rodean.
Algo hermoso que pude disfrutar este año fue reencontrarme con mis queridas amigas del colegio, conocer gente nueva que ha traido muchas cosas lindas a mi vida, y gozar sanamente de una vida social que nunca habia tenido, por haberme concentrado en otras cosas por mucho tiempo. Gracias al apoyo incondicional que me han brindado mi familia y mis amigas pude sobrepasar los momentos difíciles que me aguardaban en su momento.
Hoy definitivamente veo con mayor claridad lo que quiero lograr para el nuevo año y siento con toda seguridad que se están abriendo los caminos que parecían cerrados. Tengo plena fe de que el nuevo año nos traerá cosas maravillosas, y si enfocamos nuestra mente en esto, podemos estar seguros (as) de que así será.
Escribamos nuestras resoluciones para el nuevo año, planteando las nuevas y agregando las viejas que aún no se han podido cumplir, pero haciendo el firme propósito de llevarlas a cabo antes del 31 de diciembre del 2010. Recuerda que puedes lograr todo aquello en lo que pongas fé, empeño y perseverancia. Yo tengo las mías escritas desde ya, y aunque no las publique aquí, te aseguro que trabajaré muy duro para alcanzarlas.
Así que: Dejemos atrás todo lo negativo del pasado, y demos la bienvenida a lo nuevo, que viene cargado de esperanza e ilusión, y que podamos compartirlo juntos!Feliz Año Nuevo 2010!!!