Una vez superada nuestra gripe, hemos pasado al virus intestinal que nos hace vomitar e ir al baño con una frecuencia alucinante.
La Niña introdujo esta nueva actividad en nuestras vidas.
Las discusiones en casa han bajado a mínimos históricos, debido a las pocas ganas que tenemos de vernos los unos a los otros. El consumo de arroz hervido ha alcanzado cotas inimaginables, estoy sintiendo una tirantez en los ojos que me resulta preocupante y el Niño mira fijamente el ábaco que le regalamos de pequeño.
Esperamos ansiosos a los piojos, la sarna, algún esguince, una reparación casera superior a los 600€ e incluso un rebrote de caspa, preferiblemente de uno en uno pero si tiene que ser todo junto ¡Que sea!
Estamos seguros de que a final de año nuestro carácter será más fuerte y el vínculo familiar, si no nos hemos fugado de casa, se verá reforzado por la adversidad. Si no nos separamos definitivamente los unos de los otros ahora, nos seguiremos soportando por siempre jamás.
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure