Estos meses han sido intensos a nivel de trabajo pero también me han dejado ratitos de ocio y entre caminatas y blog, también ha habido ratitos de lectura.Como siempre, ha habido libros que me han encantado y otros que no, así que os cuento.
¡Pasen y lean!
1. Mi vida no del todo perfecta, de Sophie Kinsella.

Este libro - como todos de la autora - es de lectura MUY LIGERA. Es una historia de enredo previsible y con pocas pretensiones, pero DIVIERTE. Y la verdad es que a veces necesito este tipo de lecturas.Sus personajes son bastante estereotipados, pero pese a todo incluso tiene moralina: la vida de la gente nunca es como se ve en redes. Aparte de esto, como digo, situaciones que me han sacado carcajadas, y con eso y en el momento en que lo leí, me valió y mucho.Os dejo aquí el argumento:
Parece que Katie Brenner tiene una vida perfecta: un apartamento en Londres, un trabajo glamuroso y un muro de Instagram de lo más envidiable; pero las cosas no son como parecen. Lo cierto es que vive en una habitación de alquiler donde apenas cabe su ropa, tiene un trabajo mediocre y la vida que refleja en Instagram no es realmente la suya. Y todo puede empeorar. Su vida (no tan) perfecta se vendrá abajo cuando su jefa vaya a por ella, la despida y Katie no tenga más remedio que regresar al campo de donde procede y poner en marcha un nuevo negocio, un glamping, un camping glamuroso. Pero no contaba con que una de sus primeras clientas será su exjefa ni con todas las incógnitas que esa visita va a detonar.
2. Hotel Almirante, de Marta Rivera de la Cruz.
De Marta Rivera de la Cruz ya había leído "La importancia de las cosas" y me gustó tanto, que busqué otras obras de la autora. Y esta me ha encantado también.
Es una historia que recuerda, en su planteamiento y personajes a "Las hijas del capitán", de María Dueñas, por ser una historia de solidaridad y convivencia entre mujeres valientes. Y además, comienza con un ¿asesinato? ¿suicidio?...digamos, con un misterio.Otro punto lo tiene su final, nada previsible.Os dejo aquí su sinopsis y me repito: ¡muy recomendada!
Cristina Sanjuan es una joven madrileña que ha elegido una habitación del Hotel Almirante en Ribanova para morir. Aunque nadie en la ciudad la conocía, Cristina tiene un motivo para seleccionar el escenario de su suicidio. La muerte de la muchacha supone un cambio definitivo en los planes de Rosalia Leal, la directora del hotel y el último miembro de la saga familiar: inesperadamente, su destino de soledad, que parecía irremediable, se mostrará con un nuevo rostro, una nueva realidad cargada de esperanza.
3.La ley del amor, de Laura Esquivel.

Os sonará Laura Esquivel de "Como agua para chocolate", que en su época - hace más de 20 años - me gustó. Y este libro me deja un sabor de boca muy raro.Raro, porque es muy absurdo. Está situado en un futuro con unos inventos bastante chocantes y los personajes son curiosos: una chica algo alocada, un ángel de la guarda y un hombre que se ha reencarnado para limpiar sus pecados de otras vidas.La verdad, me ha parecido una historia muy rara e inverosimil con unas reflexiones sobre el amor bastante románticas y simplonas. Es curioso, porque la historia empieza con una historia chulísima sobre una india en la época colombina y un español que la viola y la maltrata, venganza incluída que me encantó...pero de repente, cambia las tornas, se situa en el futuro que os comento...y todo mal.Algo original del libro es que viene con un CD para que vayamos escuchando las pistas a las que hace alusión. Esto, que ahora se hace con listas de Spotify - Elisabet Benavent, César Pérez Gellida... - en ese momento era desde luego innovador.
Por cierto, la sinopsis no cuenta absolutamente nada de la novela:
La pasión amorosa es entendida aquí como una fuerza arrolladora que, por encima de todos los obstáculos, acabará imponiéndose si somos capaces de aceptar su ley, la ley del amor.
4. Rota se camina igual, de Lorena Pronsky.

¡Qué descubrimiento tan grato ha sido esta obra! No la definiría como novela, más bien es una especie de ensayo intimista acerca de cómo una mujer supera una ruptura y vuelve a empoderarse. Temas como los mitos del amor romántico, la autoestima, la tristeza, la resiliencia...van saliendo en pasajes magistrales de los que te gusta anotar para reflexionar más adelante:
"La gente que se pone contenta cuando te va bien. La que te da una palmada en la espalda cuando la estás pasando mal. El que se acuesta al lado tuyo y hace de su pecho un lugar en el mundo dónde puedas apoyar tu tonelada de suspiros.Ése, es tu mundo. Todo lo demás es lo de menos. Todo lo demás no es verdad"
Precisamente por eso es un libro de los que hay que leer despacio, paladeando. Suelo compatibilizar este tipo de lecturas con ficción. Lo que hago es leer algún capítulo al día, dándome y dándole tiempo a la lectura para calarme.No sabía que Lorena Pronsky es además de escritora, psicóloga, pero eso me explica muchas cosas. Tiene más publicaciones que buscaré porque como decía, ha sido un grato descubrimiento. Os dejo la sinopsis:Apoyada en la herida como parte inevitable de la vida, la autora nos invita a reflexionar acerca de cómo y de qué forma podemos transitar con los dolores que nos perforan el alma y nos marcan un nuevo destino. Con un lenguaje sencillo y con la capacidad magistral de poner en palabras las emociones, nos lleva por todos los huecos de la subjetividad humana para darnos, en cada texto, la llave que nos permita abrir esa puerta que uno mantiene cerrada.
Este libro es un viaje al interior de las emociones, con el que podemos identificarnos y hacernos carne a través de las heridas del desamor, del abandono, de las pérdidas, de la soledad y de la desolación.
5. Voy a hablar de Sarah, de Pauline Delabroy-Allar

Una noche, en una fiesta, dos mujeres se conocen por azar. Una vive su rutina de madre soltera y profesora con una pareja circunstancial. La otra es violinista, excéntrica, sensual y culta. Habla y ríe demasiado. Es Sarah.
A partir de entonces se suceden citas improvisadas, almuerzos, conciertos, lecturas, los cuartetos de Beethoven y la primavera en París. Hasta que un día Sarah dice: «Creo que me he enamorado de ti». Y se desata el amour fou, la pasión que quema a cada instante y que, como ocurre con todas las grandes pasiones, no puede acabar bien.
Voy a hablar de Sarah es la última gran revelación literaria francesa. Ha ganado importantes premios (estuvo a un paso del Goncourt) y ha sido comparada con Marguerite Duras y Yourcenar con su primera novela, hipnótica y arrasadora, que deja una huella indeleble.
