En infinidad de veces he comentado la importancia que le doy al cuidado de la piel. Está claro que sin un rostro en perfectas condiciones no hay look que luzca bien. Mantenerlo en óptimas condiciones pasa en primer lugar por una correcta higiene facial. En esta ocasión me centro en el ritual que sigo para desmaquillarme y por el que alguna vez me han preguntado, aunque ya lo había mencionado por encima en algunos post.
· En primer lugar, después de apartarme el cabello con un gorro de plástico de ducha para que no me moleste y ya con las manos bien limpias impregno un algodón en un desmaquillante bifásico específico para ojos y labios, después de haberlo agitado enérgicamente para que las dos fases se mezclen.
· A continuación con el mismo tipo de producto, elimino el labial que tenga con otro algodón.
· Ahora ya sí utilizo un aceite desmaquillante (mi formato preferido para retirar el maquillaje del rostro) que aplico en las manos para después masajear toda la cara y así eliminar todos los residuos, lo retiro con agua.
·Sin secar el rostro coloco un poco de jabón limpiador facial en mi Clarisonic (cepillo facial) y me lo paso durante 1 minuto, doble limpieza SIEMPRE que me maquillo, si no, solamente realizaría este paso y me saltaría el anterior.
· Enjuago, ahora si seco el rostro con una muselina suave y finalizo aplicando un poco de agua micelar a modo de tónico que me garantiza que no quede rastro de maquillaje.
Con el rostro perfectamente limpio, estoy lista para seguir con mi rutina de tratamiento nocturno actual, pero esa si les apetece se las cuento en otro post.