Pasos en falso.
Mil pasillos.
Mil paredes.
Sin salida.
Un solo camino.
Pero… ¿cuál?
La mente en blanco.
Los sentidos alerta.
Paso a paso.
Ruidos al otro lado.
Unos ojos que no ves,
te observan.
El suelo tiembla.
La luz, huye.
Y el silencio grita
en un lenguaje desconocido
que la promesa
no será cumplida.
Te ahogas en la mentira.
No hay ninguna salida
que te saque
del laberinto.