Pasta de dientes Whitening mint de la firma Marvis

En esta entrada os hablo sobre una pasta de dientes que si bien tiene mucha fama, debo decir que a mí no me ha impresionado en absoluto. No es ni más ni menos que la Whitening mint de la firma Marvis.

Marvis es una marca italiana conocida gracias a la gran variedad de pastas de dientes que ofrece. No es que tenga una fórmula súper exclusiva pero consigue sorprender a sus clientes con sabores tan extraños como la canela, el regaliz o el jengibre. Yo no he tenido la oportunidad de probar éstos sabores así que os hablaré de la que probado que la versión blanqueante de la firma.

Las que me sigáis la pista ya sabréis que yo hace alrededor de un año o más que no uso pasta de dientes convencional, sino que prefiero usar aceite dental porque considero que es mas respetuoso con mi boca y me limpia igual de bien o mejor que las otras.

Como seguro que muchas me lo preguntáis, el aceite que yo uso es de la marca Ringana, una marca de cosmética natural que cree en el principio de que un buen producto debe estar hecho a base de ingredientes naturales y principios activos puros. Este aceite ofrece la misma limpieza (incluso mejor) que cualquier otra pasta, sin embargo, no deja esa sensación de sequedad o de boca pastosa, ni daña el esmalte.

Es curioso pero desde que lo uso todo el mundo me dice que tengo los dientes muy blancos y sobre todo, yo he notado que mi sensiblidad y mis caries se han mantenido muy a raya. En fin, volvamos al tema que me pongo a escribir y mi mente se va a otras cosas.

Había oído muy buenas críticas sobre esta pasta de dientes de Marvis y al recibirla en una de las cajas de belleza mensuales, decidí probarla y ver qué tal. Como veis ya la he terminado y he de decir que para mí es un producto que ni fu ni fa, no he notado mis dientes más blancos, me da la misma sequedad en la boca que una del tipo oral b y he notado que la sensibilidad dental volvía a mí.

Así pues, no creo que se merezca la fama que tiene ni que sea la octava panacea como muchas aseguran. Solo tengo un punto a favor y es que el sabor a menta era muy rico, mucho menos artificial que en el resto de pastas. Pero vamos...que no. Creo que la firma se ha ganado la fama por sus sabores más que por la eficacia real de su producto y eso para mí es tirar el dinero. Si hay algo con lo que no me gusta experimentar en absoluto es que con mi boca, aunque me pierda sabores alucinantes.