Bueno, bonito, barato. Pero sobre todo, socorrido. Así es este pastel de atún, que lo mismo te soluciona una cena, un segundo plato o una visita inesperada.
Últimamente, ando bastante disciplinada con la cocina, y trato de organizarme al menos una tarde para cocinar o dejar medio encaucados varios menús para la semana. Me da mucha tranquilidad y me ayuda a evitar los "aquí te pillo, aquí te mato" culinarios.
Os cuento cómo lo hago en casa. Nosotros somos 4 y, depende del día, sobra más o directamente no sobra nada.
Ingredientes para cuatro comensales.* Tres latas de atún (en aceite de oliva)
* Una taza (250 ml) de leche. Usamos sin lactosa.
* Una taza de pan rallado.
* Un huevo. En casa usamos categoría L.
* Media taza generosa de queso que se funda bien (yo uso mozarella sin lactosa).
* Trozos de verdura al gusto. Daditos de calabacín, zanahorias, berenjena... Lo que haya por casa. Tened en cuenta que lleva poco tiempo de horno, así que si os gustan las verduritas tiernas, tal vez haya que darle un repaso previo.
* Tomate. Triturado, frito, casero... He llegado a ponerle salmorejo de remolacha . ¿Cantidad? Al gusto. La suficiente para que la mezcla se hidrate.
* Sal, pimienta (yo uso mezcla de pimienta negra, rosa, blanca y rosa).
* Hierbas provenzales.
Lo mezclamos todo bien con una cuchara y lo ponemos en un molde apto para horno. Tengo uno cuadrado de silicona de 22cm y 4 cm de alto y va genial. Con el horno precalentado a 180º lo metemos 15-20 minutos* y voilà! .
Ojo, los tiempos del horno dependen mucho del molde que utilices, de lo que funda el queso, y del propio horno, claro. Para mi gusto, es mejor quedarte algo corta que pasarte y que se reseque.
Ea, qué aproveche!