Requiere muy pocos ingredientes:
200 g de queso filadelfía
2 paquetes de croissants para hornear (Rebecca explica dónde encontrarlos aqui)125 g de azúcar
1 huevo
25 g de azúcar glass
Primero precalentar el horno a 170 grados.
Mezlar el azúcar y el queso y despues añadir el huevo hasta que tenga una textura homogénea.
Ahora en un molde para pasteles, preparar la capa de abajo usando 1 paquete de los croissants.
Encima de la capa vertir toda la mezla del queso.
Ahora usar el otro paquete de croissants para hacer la capa de arriba. Y ya está, no hay que hacer más.
Meter el pastel en el horno durante 30-35 minutos.
Sácalo cuando esté dorado. Déjalo enfriar.
Cortar y servir con azúcar glass. Disfrutar con una tazita de café! Es algo diferente y algo especial. Mmmmm.
Espero que os guste.
Un abrazo,
Ava