“En el primer mundo, si te duele algo hay pastillas para mitigar casi cualquier dolor. Pero… ¿qué pasa si lo que te duele es el dolor ajeno, el dolor de los que no tienen pastillas para curar su sufrimiento?
¿No es genial, que nosotros que tenemos pastillas de casi todo, podamos tomarnos una para calmar el dolor de los que no tienen?”
Con estas palabras la ONG de Médicos Sin Fronteras acaban de anunciar una nueva campaña de ayuda contra el dolor ajeno. Comprando una caja de caramelos de menta sin azúcar -de venta exclusiva en farmacias- y al precio de sólo 1 euro se está colaborando en una campaña solidaria de ayuda a enfermos olvidados.
El objetivo de esta campaña, organizada por la ONG médico-humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF), es ayudar a todas esas personas que no tienen recursos, a sobrevivir a este tipo de enfermedades. Porque no hay excusa: “rescatar a estas personas de la indiferencia y el abandono es tarea de todos y, de alguna forma, estas pastillas son como un antídoto contra ese olvido“.
La venta de las ‘pastillas’ comenzó en noviembre y tendrá una duración de un año. Cada caja irá acompañada de información detallada sobre enfermedades olvidadas, como la malaria, la enfermedad de Chagas, la tuberculosis multirresistente, el sida infantil, el kala azar y la enfermedad del sueño.
Una amiga mía (¡gracias Mariola!) me las ha recetado-regalado y yo quiero hacer lo mismo, como siempre en forma de pequeño gesto, así que los cinco primeros curiosill@s que me contéis qué tipo de dolor ajeno tenéis os recetaré-regalaré una cajita de pastis contra ese dolor. Me gustaría que explicarais bien vuestros “síntomas”, qué tipo de dolor es, desde cuando, cómo pensáis que se curaría… todo lo que queráis. Pensad que cada pequeño gesto cuenta y que es una gran ayuda que existan este tipo de campañas porque eso quiere decir que detrás de ellas hay gente que se implica y que quiere que esto cambie.
Para terminar esta entrada os pongo un vídeo de Luis García Berlanga: