La última campaña llevada a cabo por la organización sin ánimo de lucro Médicos Sin Fronteras, conocida como “Pastillas contra el dolor ajeno”, lleva ya vendidas más de 3.000.000 de cajitas de caramelos, cuyos beneficios han sido íntegramente destinados a combatir distintas enfermedades en Bolivia y Zimbabue.
De acuerdo a Paula Farias, portavoz de esta bonita iniciativa, “los datos suponen un éxito sin precedentes, sobre todo teniendo en cuenta que sólo llevamos tres meses desde el lanzamiento de la campaña”.
Las cajas, de color rojo y de venta en farmacias de España, se venden al módico precio de 1€, factor que ayuda a que cualquier persona pueda aportar su granito de arena.
El éxito de esta iniciativa se debe especialmente a la movilización de la sociedad con la campaña, destacando también la contribución por medio de las redes sociales como Twitter o Facebook.
El dinero recaudado se ha destinado a los programas que lleva a cabo la ONG en localidades como Bulawayo y Tsholotsho, y que permiten tratar a casi 10.000 niños con sida al año, entre otras enfermedades como la del sueño o la malaria.
Asimismo, buena parte de los recursos también ha servido para luchar contra la enfermedad de Chagas, responsable de 14.000 muertes al año, y que se estima que padecen entre 10 y 14 millones de personas en América Latina. El país boliviano, el más afectado a nivel mundial por eta enfermedad, ha sido el principal beneficiado por las aportaciones de MSF.
Parte de la notoriedad de esta iniciativa también se debe a la FEDIFAR, la patronal del sector de distribución farmacéutica en España, y que ha colaborado con MSF distribuyendo las pastillas contra el dolor ajeno.
Concluyendo, los responsables de la campaña se muestran felices al señalar que con la contribución de la sociedad, es factible conseguir“milagros” de este tipo, y “lograr rescatar a los enfermos olvidados para darles una oportunidad”.