Azul montañas, platina con una pizca de ocre,diluyendo las crines agitadas de dos costas Caribe y Pacífico, Nicaragua y Panamá, sus hermanas: en este país vivo YO…
Morena de vida
te vengo a cantar mis penas
a recordarte el día
en que vistes el alma mía.Mi país; juego de memorias que viene y va, como el mar…Un país pequeño, tan pequeño,que cabe en la vuelta de una pluma que ondea firme y tenaz en los colores del tiempo…En ese país de montañas, planicies, cerros, valles y bosques melancólicos, vivo YO...Yo no envidio los goces de Europa,
la grandeza que en ella se encierra;
es mil veces más bella mi tierra
con su palma, su brisa y su sol.
Cuando era niña, y llegaba setiembre,sabía que era el mes de la patria sin que nadie me dijeraporque cambiaban los colores del día, tenía uniforme con olor a nuevo, y las personas gozaban un algo distinto en la voz elegante y sinuosa de la tersura del sol, cantando conmigo:Luego viene la tarde divina
y el contorno se mira sangrar;
hay marimbas que truenan lejanas
y la pampa se vuelve inmortal.Ahora repaso con lenta letra, el borrón del tropel de las ventanas guindado de banderas,la curveada congregación de escolares,y mientras el desfile de faroles que ya nunca volverán para mí,se pierde en los arreglos finales del acto cívico,me veo alineada, la última o primera de una fila larga, la mirada al frente, y la mano en el pecho, mis codos entendían el susurro hilarante de
levanten la frente
al sol refulgente de la libertad.
Eran años cortos que crecieron conmigo y la patria me entraba completa como una cruz de oro que colgaba de mis labios…
Costa Rica es mi patria querida,
vergel bello de aromas y flores
cuyo suelo de verdes colores
densos ramos de flores vertió...
Y es que en setiembre, de primero a sexto, siempre fue lo mismo: blanco y azul, las calles, lucían el claro-oscuro de puertas enlutadascon crepones de colores patrios, esperando los desfiles aglutinantes de las escuelas…
Yo te llevo en el pecho
como una perlita gata
que adoraron los indios
al nacer la luz del alba.

Salud, noble bandera
de blanco, azul y rojo;
jamás ningún sonrojo
fue mancha a tu esplendor…En setiembre, miraba el cielo, y en él ondeaba la letra clara y tristona de mi profesor de música escribiendo…Noble patria, tu hermosa bandera
expresión de tu vida nos da;
bajo el límpido azul de tu cielo
blanca y pura descansa la paz.Yo era la niña negra que no sabía si tenía patria o no, o que era patria pero como todos los demás cantaba
sus pétalos suaves agita
la linda GUARIA MORADA
flor de esta tierrabendita...
La septiembre que recuerdono tenía la cursiva ni buena letra de las golondrinas, que visitaban las aulas por las tardes, tampoco estas, es solo que en aquel tiempo mi patria, era igual a una de esas golondrinas de vuelo librecon cuyo trinar aprendía, que a estepequeño país,

y por ella mi vida daría,
siempre libre ostentando alegría
de sus hijos será la ilusión...
En este país pequeño vivo yo,y cada día pese a todo, más la amo como es,porque cabe en los pliegues de mis dedos; por tanto, siempre mía será…
Para La Coleccionista de Espejos:
Dlia Mc Donald Woolery
