La autora madrileña le ofrece una esplendorosa oda a su ciudad y a los personajes que habitan su noche
La escritora Patricia Ruiz-Espejo tiene ya experiencia en el mundo del relato corto, pero ahora ha decidido lanzarse al género de la novela con su libro La luz formidable. Finalista del XIV premio de novela “Onuba”, este libro se edita ahora para encandilar al público, especialmente a aquel que haya vivido lo suficientemente de cerca las noches madrileñas.
Y es que la historia narra los acontecimientos que se suceden a lo largo de una noche de fin de semana en la capital española. Los protagonistas, los hermanos Álex y Sacha y la misteriosa Valeria, se conocerán en el momento y el lugar exactos, lo que les dará alas para lanzarse de cabeza a la incesante y trepidante aventura de la fiesta nocturna. Contagiados por un irrefrenable espíritu libre, los jóvenes descubrirán en esa extraña relación a tres bandas sentimientos que, quizás, nunca querrían haber encontrado.
Porque si bien el ambiente festivo que la autora ha construido se trata de una perfecta atmósfera que embriaga tanto a los personajes como al lector, también ha sabido prestar atención al rico mundo interior de Álex, Sacha y Valeria. En definitiva, ha tejido con astucia un perfecto collage de sensaciones y sentimientos que se potencian con ese viaje extrasensorial que ofrece el mundo canalla de la nocturna Madrid.
La luz formidable aborda los descubrimientos de la juventud, aquello que espera más allá de un simple deseo de libertad y de rebeldía (ingredientes clave, por cierto, a la hora de dejarse llevar a través de las líneas del libro). Ruiz-Espejo define así este punto de inflexión en su novela, el cual se alarga hasta el amanecer del nuevo día y mantiene al lector en un constante e intenso devenir de emociones: “El aprendizaje viene cuando, al combinarse y producirse esta relación a tres bandas, salen a la luz cosas nuevas, sobre todo en la relación entre los dos hermanos; sentimientos y reacciones que no conocían el uno del otro, o que intuían, pero no habían mostrado hasta ahora tan a las claras”.
Este libro ataja de forma directa la realidad de toda una generación. No en vano Álex, el narrador de la historia, ofrece su alma entera en largas disertaciones poéticas sobre la rebeldía de su juventud. Tampoco ignora las oportunidades que las drogas y el anonimato ofrecen para el autodescubrimiento, caminos que se sondean cada noche en cada lugar del mundo. La luz formidable se construye sobre la figura inmóvil e imponente de la milenaria Madrid, pero su mensaje traspasa y alcanza el parecer de todos aquellos jóvenes que hoy en día siguen buscando un lugar donde sobrevivir.
Patricia Ruiz-Espejo lo confiesa: "Madrid te mata de amor". Por eso ha dejado que el alma de su ciudad penetre en su libro y lo convierta en una verdadera oda a su amabilísima figura. La luz formidable es, por ese motivo y todos los demás mencionados, un libro plagado de eufóricas pasiones. Agita al lector y agita su corazón, pero sobre todo hace abrir los ojos a un mundo que, en muchas ocasiones, las personas se empeñan en no querer descubrir: el que habita en ellas mismas.